Azalea, Flor Del Desierto (Entre El Amor Y El Odio)

por SweeT PrincesS Dom Ago 12, 2012 4:11 am

"La Venganza De Azalea"

PARTE 16

Era de noche y la luna llena apenas iluminaba el sendero lleno de árboles, flores y piedras.
Pero ella seguía corriendo sin mirar atrás. Sin importarle que iba descalza y que las piedras lastimaban sus delicados pies.
Solo deseaba huir del Diablo y llegar a los brazos de su ángel de la guarda. Solo él podía salvarla de ese demonio.
La princesa llegó a un bosque espeso y de flores altas.
Lo caminó hasta llegar a un gigante portal de oro y luz blanca.
Estiró el brazo y con la mano acarició esa luz.
Entonces se apagó y una fuerte corriente de aire la golpeó y la lanzó al suelo.
Cuando miró al frente, vio salir del portal a una gran bestia con garras afiladas y una boca llena de largos colmillos.
La chica comenzó a gritar, sin poder moverse y entonces, la bestia alzó una garra y rasgó la piel del rostro de ella.
El dolor y la sangre fueron insoportables, y antes de que dicha bestia volviera a darle otro zarpazo, la princesa cerró los ojos y siguió gritando.

CHALLEN: ¡¡Alteza, despertad!!

Challen ya no sabía qué hacer para conseguir que su princesa despertase de la pesadilla que la estaba torturando.
No dejaba de gritar y patalear en la cama, y verla así lo superaba.
Kupó y Mog volaban a su alrededor, también angustiados.

KUPÓ: Es la primera vez que tiene una pesadilla tan larga y fea, kupó.
CHALLEN: ¿Desde cuándo padece estas pesadillas?
KUPÓ: Toda la vida, kupó.
CHALLEN: ¿A causa de qué?
KUPÓ: De su infancia, kupó.

Azalea se cubrió el rostro con las manos y siguió gritando entre sueños.
Desesperado, Challen la abrazó con fuerza y le susurró palabras de consuelo.
Tener a esa hermosa princesa entre sus brazos y tan parecida a su prometida estaba acabando con él.
Desde el día en que fue nombrado caballero personal y protector de Azalea hasta hoy, había sido un completo infierno.
Llegó a pensar que sería fácil convivir con la imagen de su prometida Zannaleah, pero estaba muy equivocado.
Cada sonrisa, cada mirada y cada gesto de la princesa era una puñalada más para el corazón de Challen.
Y el vacío que había dejado Zannaleah se estaba llenando de la necesidad de amar a la princesa Azalea.
Eso iba en contra de sus sentimientos, pero el tiempo se estaba encargando de poner su corazón en manos de Azalea.
Y sentía miedo. Un miedo terrible.
Temor a olvidar a su Zannaleah y enamorarse de la princesa.
Tragó saliva y decidió dejar esos pensamientos.
Entonces se dio cuenta de que Azalea había dejado de gritar y patalear.
Agachó la mirada hacia ella y vio que lo estaba mirando fijamente.
Challen se sonrojó y se apartó para soltarla.

CHALLEN: Lo-lo siento, Alteza… (///)

Sin entender por qué, la princesa rompió a llorar y Challen se sintió perdido.
Kupó y Mog la abrazaron pese a ser tan pequeños.

MOG: No llores, Azalea…
AZALEA: Estoy cansada de las pesadillas…
KUPÓ: Te comprendemos, kupó…

Challen se la quedó mirando, aguantando las ganas de volver a abrazarla.
Quería secar sus lágrimas. Calmas sus temores. Consolar su dolor.
Pero eso no le correspondía a él, pues se había dado cuenta de que el corazón de Azalea pertenecía al príncipe Falon.
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Después de darse un relajante baño y ponerse un bonito vestido blanco y rosa, Azalea se dirigió hacia la habitación de invitados, dónde había sido convocada por el rey.
Detrás la seguía Challen, que parecía más distante de lo habitual.
Al llegar a dicha habitación, entraron y vieron tres camas, en las cuales dormían Falon, Dalden y Shaner.
Tedra y Cerith estaban al lado del rey, y las dos tenían expresiones de preocupación.
Entonces Azalea recordó el viaje en nave y el haberse perdido en aquél bosque.
No sabía cómo había llegado hasta aquí. Y tampoco sabía qué les había pasado a Falon, a Dalden y a Shaner.

ZAEBARD: Azalea, ¿qué viste en el bosque?
AZALEA: ¿Eh?
ZAEBARD: Dime qué recuerdas.
AZALEA: La verdad…no mucho. Ellos me dejaron sola en la nave, y decidí salir a buscarlos. Me perdí en el bosque, dónde las flores y los árboles eran más altos de lo normal. Pero empecé a oír voces cantando y se me cerraron los ojos. Ya no recuerdo nada más.
ZAEBARD: Tu caballero Challen te encontró inconsciente en el jardín, al lado de Falon, Dalden y Shaner, también inconscientes. ¿Pudiste ver una fuerte luz?
AZALEA: Sí. Iluminaba tanto que parecía ser de día.
ZAEBARD: ¿Y lograste ver de dónde provenía esa luz?
AZALEA: No lo recuerdo.

Se hizo el silencio.
Zaebard se quedó pensativo.
Si Azalea había cerrado los ojos, eso quería decir que los dioses se habían encargado de traerla sana y salva al reino Aion junto a los tres chicos.
Eso significaba que los dioses estaban protegiendo al Oráculo.
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Falon estaba dentro de un hermoso lago, dónde el agua era cristalina y el sol brillaba en lo alto del cielo azul.
El cántico femenino lo relajaba tanto que los párpados le pesaban.
Pero no quería quedarse dormido.
Deseaba seguir escuchando esas voces melodiosas…
Oyó unas risas y se dio la vuelta en el agua.
Se le cortó la respiración al ver acercarse un grupo de mujeres completamente desnudas.
Todas hermosas…perfectas…
No podía dejar de mirarlas. Y ellas, entre risas coquetas, se metieron en el agua y se acercaron a él para rodearlo y acariciarlo.
Falon sonrió y se dejó tocar, sintiéndose en el cielo.
¿Qué había hecho para merecer este delicioso regalo?

AZALEA: Falon.

El chico se puso tenso. Esa voz…
Giró la cara y el corazón se le aceleró.
Ahí en la orilla del lago estaba su princesa, con el cuerpo envuelto en una suave toalla, y lo miraba con intensidad.
Pronto se sintió incómodo entre todas esas mujeres, ya que Zannaleah debería estar furiosa y odiándolo.
Quiso apartarse de las demás y darle explicaciones a su amada, pero la voz no le salió al ver que la princesa se quitaba la toalla y mostraba su perfecto cuerpo desnudo.
Oh, Dios…qué hermosa era…
En cuanto Azalea se metió en el agua, las demás mujeres desaparecieron como por arte de magia.
Pero a él no le importó. Solo tenía ojos y corazón para su princesa, que en cuanto se acercó, Falon la abrazó con fuerza.
Sus cuerpos desnudos…piel contra piel…alientos mezclándose…
Fue una explosión de deseo y amor.
Falon comenzó a besarla con ansias, recorriendo con sus fuertes manos la delicada espalda de su princesa.
La deseaba. La necesitaba. Pero ante todo la amaba.
Sintió que ella apoyaba sus pequeñas manos en su fuerte pecho.

AZALEA: Falon…

No. No quería parar. No quería abrir sus ojos.
Deseaba hacerle el amor.

AZALEA: Falon, despierta ya.

¿Despierta ya?
El chico abrió al fin los ojos y lo primero que vio fue el bello rostro de la princesa.
Pero no estaba desnuda. Tampoco estaban en un lago. Y él yacía sobre una cama.
Maldita fuera…
Todo había sido un sueño.
Se pasó la mano por el rostro, sintiéndose frustrado al haber sido despertado en el mejor momento.
Vio que la princesa lo miraba con expresión seria.

FALON: ¿Qué ocurre?
AZALEA: Dímelo tú. Llevas un día y medio dormido.
FALON: ¿Qué?
AZALEA: Igual que Dalden y Shaner. Desde que estuvimos en aquél lugar luminoso hasta ahora, has estado inconsciente.

Falon miró a su alrededor, y efectivamente, Shaner y Dalden dormían en las camas de al lado.
Entonces recordó que la princesa se había perdido en el bosque, y verla sana y salva frente a él fue un gran alivio.

FALON: ¿Cómo llegaste al reino?
AZALEA: No lo recuerdo. Dime si tú recuerdas cómo llegaste hasta aquí.

Se quedaron mirando durante largos segundos hasta que ella se acercó tanto a él que sus narices se tocaron.
Cuando la princesa lo miraba así, con una ceja levantada, era porque quería saber algo.

AZALEA: ¿A qué fuisteis a ese lugar? ¿Qué era esa luz tan fuerte? ¿Qué es el Oráculo? ¿Qué fue lo que realmente nos trajo aquí?
FALON: ¿Por qué eres tan terca?
AZALEA: Me gusta serlo. Ahora, responde.
FALON: Déjame dormir.
AZALEA: Ya has dormido suficiente.
FALON: No importa. Necesito seguir con el sueño que estaba teniendo y que tú cortaste.
AZALEA: Pero…
FALON: Era tan agradable…
AZALEA: Falon…
FALON: …verse en un lago…rodeado de mujeres hermosas y desnudas…

Azalea gruñó, le lanzó una almohada en la cara y se fue, cerrando de un portazo.
Falon sonrió y cerró los ojos.
Quería soñar la escena en la que le hacía el amor a su princesa.
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Shaner estaba dentro de una sala llena de armas.
Había espadas de todos los tamaños y materiales.
Admiró los escudos con la insignia de Aion y los puñales con diamantes incrustados.
También había armaduras relucientes y trajes de guerrero.
Oyó unas risas y se volteó para encontrarse con un grupo de mujeres preciosas y desnudas.
Se sintió tan incómodo que agachó el rostro para no mirarlas.
De todos modos, ellas se acercaron y lo abrazaron coquetamente.

CHICA: Todo esto te pertenece.
SHANER: ¿Qué?
CHICA: Eres el mejor guerrero y mereces las mejores armas de Aion.

Shaner no se lo podía creer.
Dentro de esa sala había más de cien armas distintas. Y de la mejor calidad.
¿Todo…era suyo?

TEDRA: Shaner.

El capitán se puso tenso. Esa voz…
Se dio la vuelta y vio a Tedra con una extraña expresión en el rostro.
¿Qué hacía ella aquí?
Las demás mujeres desaparecieron de repente y la princesa de Kan-is-Tra comenzó a desnudarse.
De inmediato, Shaner le dio la espalda para no sufrir un ataque de nervios.

SHANER: ¿Qué demonios estáis haciendo?

Gimió al sentir que ella lo abrazaba por detrás y pegaba sus suaves pechos contra su fuerte espalda.

TEDRA: Hazme el amor.
SHANER: ¿Qué?
TEDRA: Shaner… Shaner…

Oír su nombre en la boca de Tedra era una tortura.
Pero más insoportable era sentir su delicado cuerpo pegado al suyo más grande.

TEDRA: Capitán Shaner, despierta.

¿Despierta?
Shaner parpadeó y se vio acostado en una cama, dentro de una habitación con Tedra mirándolo con el ceño fruncido.
No estaba desnuda. Tampoco había armas alrededor.
Todo había sido un sueño.
¿Pero qué hacía ella aquí?

TEDRA: Al fin despiertas.
SHANER: ¿Al fin?
TEDRA: Llevas un día y medio dormido.
SHANER: ¿Qué?

Falon se levantó de la cama y se acercó a la de Shaner para mirarlo.

FALON: Así es. ¿Recuerdas cómo llegamos desde el bosque hasta aquí?
SHANER: No…
TEDRA: ¿Se puede saber qué está pasando?
FALON: Yo solo recuerdo que estábamos buscando a Azalea en ese bosque.
TEDRA: ¿Azalea? ¿Ella estaba con vosotros?
SHANER: ¿Sigue perdida?
FALON: No. Por suerte apareció aquí sana y salva. Ella tampoco recuerda cómo llegó.

Al ver que la ignoraban, Tedra se enfurruñó y salió de la habitación, en busca de Azalea.
La encontró en el comedor real junto a Challen.

TEDRA: Contigo quería yo hablar.
AZALEA: Pues yo contigo no.
TEDRA: ¿Qué sabes de todo lo que están haciendo Falon, Shaner y Dalden?
AZALEA: Nada.
TEDRA: ¿Entonces qué hacías con ellos?
AZALEA: No es asunto tuyo.
TEDRA: Claro que es asunto mío. Falon es mi hermano.
AZALEA: Entonces que te lo cuente él.

De pronto se oyeron unas trompetas y los soldados corrieron hacia las murallas del reino.
Azalea, Challen y Tedra se asomaron a la terraza y vieron que aterrizaba una nave sobre el descampado verde.
¿Volverían a atacarles?
La puerta se abrió y apareció un hombre con túnica blanca y roja y con la cabeza calva.
Se acercó al rey y se postró sobre una rodilla.

HOMBRE: Majestad, vengo a pediros ayuda.
ZAEBARD: ¿Qué ha ocurrido, Shanden?
SHANDEN: La gente de mi territorio ha desaparecido, incluida mi familia.
ZAEBARD: ¿Qué?
SHANDEN: Algo grave está pasando, Majestad.
ZAEBARD: Será mejor que hablemos largo y tendido.
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En la sala de reuniones estaban Zaebard, Falon, Shaner y Dalden, el cual ya había despertado de su profundo sueño.
El emperador del Sud de Aion, llamado Shanden, abrió un mapa sobre la mesa.
Un mapa de la ciudad entera de Aion con lugares marcados por un sello rojo.

SHANDEN: Cian llegó al Sud y me contó todo sobre el Oráculo. Me ofreció unirme a él y a la fuerza del Oráculo e ir en contra vuestro, Majestad. Yo me negué y entonces me amenazó con destruir mi imperio. Esa misma noche se oyó una gran explosión, y salí asustado de la cama. Pero no vi nada destruido. Solo pude ver restos de luz rosada flotando en el aire. Al día siguiente, la gente de mi territorio había desaparecido.
ZAEBARD: ¿Será cosa de Cian?
SHANDEN: No lo sé, Majestad. Pero he llegado a saber que los emperadores Yimbo y Denki se han unido a Cian.
ZAEBARD: ¿Y qué ha pasado con el emperador Rerion?
SHANDEN: No ha dado señales de vida.

El joven rey se pasó las manos por el cabello y rostro.
Jamás imaginó que su mejor caballero lo llegase a traicionar tan gravemente.
¿Qué había hecho mal?
A su corta edad, Zaebard había intentado ser un buen rey y gobernar Aion con sabiduría y humildad.

SHANER: Majestad, luchemos.
ZAEBARD: Lo vuelvo a repetir: nada ni nadie podrá contra la fuerza del Oráculo.
SHANER: ¿Creéis entonces que el Oráculo se dejará dominar por Cian?
ZAENARD: Si se ha atrevido a cruzar el portal, sé muy bien que habrá conseguido armas llenas de magia.

Dio un puño sobre la mesa y gruñó.
Todo se estaba complicando y no tenía ideas para detener a Cian.
Falon se reclinó hacia adelante, mirando al rey con preocupación.

FALON: Shaner, Dalden y yo fuimos al Oráculo a conocer la posición de Cian, pero no vimos a nadie ahí. Como tampoco pudimos acercarnos al Oráculo. Pues unos cánticos celestiales nos dejaron debilitados.
SHANER: Fueron los dioses, Majestad. No nos permitieron acercarnos al Oráculo. Quizá Cian tampoco pudo.
FALON: Deberíamos volver al Sud de Aion. En vez de acercarnos al Oráculo por delante, deberíamos hacerlo por detrás.
SHANER: Sí, es buena idea. Pero hagámoslo de día, así la luz no nos cegará.

En cuanto la reunión terminó, Falon fue el primero en levantarse y acercarse a la puerta.
Tras abrirla, arqueó una ceja al ver a Azalea y a Tedra con las orejas cerca de la puerta.
Obviamente habían estado escuchando la reunión.
Cerith estaba más atrás, aparentemente avergonzada.

FALON: ¿Os hacéis llamar dignas princesas?
AZALEA: ¿Qué insinúas? (¬ ¬)
FALON: Escuchar tras las puertas es de mala educación.
TEDRA: Esconderle los secretos a tu hermana es traición. (¬ ¬)
FALON: ¿Dónde está escrito eso?
TEDRA: ¿Tan peligroso es ese Oráculo?
AZALEA: ¿Y por qué existe entonces?
TEDRA: ¿Es verdad que existen las armas mágicas?
AZALEA: ¿Está desapareciendo la gente?
TEDRA: ¿Por qué no podemos saber nada?

Falon se encogió de hombros y se alejó, dejando a las princesas sin las respuestas que anhelaban saber.
Después salió Shaner, que fue acorralado por Tedra, la cual lo miró con desafío.

TEDRA: Te ordeno que me lo cuentes todo.
SHANER: ¿Me ordenáis?
TEDRA: Soy una princesa y tú un simple guerrero. Tienes que obedecerme.
SHANER: Yo solo obedezco al rey Zaebard.

Le hizo una reverencia y se marchó.
Entonces Azalea, Tedra y Cerith entraron en la sala y se postraron frente al rey, el cual las miró con una sonrisa divertida.
Dalden decidió levantarse e irse también.

AZALEA: ¿Qué es el Oráculo?
TEDRA: Nosotras también queremos saberlo.
ZAEBARD: ¿Sabéis guardar secretos?
AZALEA Y TEDRA: ¡Claro que sí!
ZAEBARD: Bien, el Oráculo fue creado por los dioses. Es un portal de luz que lleva a otros mundos.
TEDRA Y CERITH: Oh…
AZALEA: ¿En serio?
ZAEBARD: Sí. Durante generaciones, su existéncia ha estado guardada en secreto para protegerlo de gente avariciosa como Cian.
AZALEA: Entonces…tras ese portal…hay más planetas…más gente…
ZAEBARD: Así es.
TEDRA: ¿Y por qué debe mantenerse oculto? Siempre es agradable conocer otros mundos y otras personas.
ZAEBARD: Detrás de ese portal existe algo peligroso.
AZALEA: ¿Cómo qué?
ZAEBARD: La magia.
AZALEA, TEDRA Y CERITH: Oh…
ZAEBARD: Ahora Cian me ha traicionado de la peor manera, poniendo en peligro a Ciudad Aion.
CERITH: ¿Y cómo podría cerrarse el Oráculo?
ZAEBARD: Una vez abierto…deberán pasar almenos diez años para que pueda cerrarse por sí solo.
AZALEA: ¿Por qué tanto tiempo?
ZAEBARD: Así lo decidieron los dioses. La luz es tan fuerte y el portal tan grande que quizá sea eso lo que demora su cerramiento.
AZALEA: Pero con estos diez años podrían pasar muchas cosas.
ZAEBARD: Ya están pasando.
AZALEA: ¿Por qué no pones vigilancia y protección en el Oráculo?
ZAEBARD: ¿Qué?
AZALEA: Durante todo el día y la noche. Así nadie se acercará.

Después de unos segundos de silencio, el joven rey se acercó a Azalea y la besó en la boca.
Los ojos de Cerith y de Tedra se abrieron como platos. Y las mejillas de Azalea se pusieron más rojas que un tomate.
Zaebard sonrió y se marchó, dejándolas a las tres sin habla.
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Azalea estaba en la sala de estudios, atenta a la charla de la profesora, que hablaba sobre la cultura y las costumbres de Aion.
Había colgado en la pared un gigantesco mapa donde podía apreciarse la ciudad entera.

PROFESORA: Como véis, es tan grande que está dividida terrenalmente en cinco naciones, compuestas por los cuatro puntos cardinales. En cada nación hay un imperio gobernado por un emperador. En el Sud tenemos al emperador Shanden. En el Norte a Rerion. En el Este a Yimbo.
En el Oeste a Denki. Y en el centro de la ciudad, sobre la montaña más alta de todas, está el reino Aion, gobernado por nuestro rey Zaebard. En toda la ciudad se habla el mismo idioma, pero cada nación tiene su cultura. En el Norte siempre es invierno. En el Este siempre está lloviendo. En el Sud hace demasiado calor. Y en el Oeste existen las flores más hermosas de toda la ciudad. Y aquí, en el reino, tenemos de todo menos frio y nieve. Será que la montaña está tan cerca del sol.

Siguió con el discurso, pero Azalea dejó de estar atenta para recordar el beso que le había dado el rey Zaebard.
¿Por qué habría hecho algo así? Él tenía esposa e hijos.
Desvió esos pensamientos y se centró en el plan que había ideado en contra de Aika.
Con la ayuda de Lilly y de Lenoic le daría un escarmiento.
En cuanto la clase terminó, los alumnos empezaron a recoger sus libros.
Entonces Lenoic se acercó a Aika.

LENOIC: Ne-necesito tu-tu ayuda…
AIKA: ¿Por qué? ¿Qué ocurre?
LENOIC: A-Azalea y Lilly han que-quedado en el jardín pa-para pelear.
AIKA: ¿En serio?
LENOIC: Yo-yo solo no podré de-detenerlas.
AIKA: ¿Detenerlas? ¡Ja! Deja que se maten. ¡Esta pelea no pienso perdérmela!

Salió corriendo hacia el jardín y al llegar no vio a nadie ahí.
¿Quizá la pelea sería en otro de los muchos jardines que rodeaban al reino?
En cuanto se volteó para regresarse, Azalea ya estaba ahí, sonriendo con malicia.
En sus manos tenía un cubo lleno de agua, el cual lanzó sobre Aika, empapándola por completo, provocando la risa de la princesa.

AIKA: ¡¿Qué haces?!
AZALEA: Vengarme de ti.
AIKA: Pues no lo has conseguido.
AZALEA: ¿Por qué lo crees así?
AIKA: Tú fuiste el hazmerreír de todos. Yo no lo soy de nadie.
AZALEA: Pero yo me estoy riendo de ti.
AIKA: No me afectan tus burlas.
AZALEA: Pues deberías mirar a tu alrededor, ¡eh!

Aika así lo hizo y en los ventanales del castillo estaban asomados todos los alumnos, mirándola y riéndose de su horrible aspecto mojado.
Llena de vergüenza y humillación, Aika empujó a Azalea y salió corriendo hacia el castillo.
Pronto Lilly y Lenoic se acercaron a la princesa.

LILLY: ¡Ha estado muy bien!
AZALEA: Lo sé.
LILLY: Ahora será la burla durante unos cuantos días.
AZALEA: Se lo merece.
LILLY: ¿Tú qué opinas, Lenoic?
LENOIC: Yo…yo…
LILLY: Eh, por ahí viene el príncipe Falon.
AZALEA: ¿Qué?

Su corazón se aceleró al ver la expresión de furia que traía en su atractivo rostro.
En cuanto llegó hasta ella, Falon la agarró del brazo y la arrastró hacia un lugar apartado, lejos de Lilly y Lenoic.

AZALEA: Estoy harta de que me trates así.
FALON: Y yo estoy harto de que hechices a todos los hombres que te miran.
AZALEA: ¿Eh?
FALON: Tedra me lo ha contado.
AZALEA: ¿De qué hablas?
FALON: El rey Zaebard te besó.

Las mejillas de la princesa se tiñeron de rojo, dando a entender que así era.
La furia del chico creció aun más y apretó tanto los dientes que le dolió la cabeza.

AZALEA: Fue un beso furtivo. Yo no me lo esperaba y…
FALON: Lávate la boca.
AZALEA: ¿Qué?
FALON: No volveré a besarte a menos que te laves esos labios.
AZALEA: Estás exagerando. (¬ ¬)
FALON: ¿Exagerando? ¿Qué tal te sentaría que yo te besara después de haber besado a Cerith?
AZALEA: ¿Y por qué la metes a ella? ¿Acaso todavía te gusta?
FALON: No me cambies el tema.
AZALEA: Mejor déjame en paz.

Quiso irse pero Falon la atrapó entre sus brazos una vez más.

FALON: Que te entre esto en tu cabecita de una vez por todas: eres solamente mía. Nadie tiene derecho a tocarte. ¿Queda claro?
AZALEA: No me trates como si fuera una muñeca de tu propiedad. Y suéltame. Lilly y Lenoic nos están mirando. (///)
FALON: ¿Qué importa? Nos amamos. Mostremos este amor a todo el mundo.

Entonces la besó con exquisita delicadeza y ternura, provocando así que ella se derritiera en sus brazos.
La mente de Azalea se quedó en blanco.
Solo pudo sentir y dejarse llevar por sus sentimientos.
Un momento. ¿Sentimientos? ¿Qué sentimientos?
Asustada, rompió el beso y cerró los ojos con fuerza.

FALON: ¿Qué ocurre?
AZALEA: Di-dijiste que…me respetarías hasta que yo decidiera buscarte.
FALON: ¿Y cuándo lo harás, Zannaleah?
AZALEA: Yo…
SOLDADO: Príncipe Falon.

Se acercó un soldado a los dos, obligándolos a separarse.

SOLDADO: El rey quiere veros en la sala de reuniones.

Falon miró por última vez a la princesa y tras un largo suspiro, se marchó con el soldado.
Entonces Lilly y Lenoic se acercaron a Azalea.

LILLY: ¿Sois novios?
AZALEA: Ehm…bueno…
LILLY: Hacéis buena pareja. (^ ^)
AZALEA: Tengo que irme. Mi caballero debe estar buscándome.

Les sonrió y se dirigió hacia su habitación.
Necesitaba estar sola para reflexionar.
Ya tenía enamorado a Falon, así que… ¿A qué estaba esperando para vengarse de él?
Ya era hora de dar el paso definitivo.
Subió las escaleras y vio a Challen en el pasillo, que al verla, la miró con preocupación y alivio a la vez.

CHALLEN: Alteza…
AZALEA: Siento llegar tarde. Me entretuve conversando con unos compañeros.
CHALLEN: ¿Cómo os fue en clase?
AZALEA: Bien. Gracias.
CHALLEN: ¿Os apetece tomar un té?
AZALEA: Claro.

Sonrieron y se dirigieron a la sala del té, la cual estaba llena de alumnos, incluidas Tedra y Cerith.
Azalea estuvo gran parte de la hora ideando el último plan para la venganza contra Falon.
Al fin la justicia brillaría en su vida.
________________________________________________________________
TO BE CONTINUED...

por **Katherina Kusanovic** Dom Ago 12, 2012 3:10 pm

Fuaa!!! yo sinceramente nunca me espere que el rey tambien se enamorara de ella! O.O que chica, es como un diamante! Todos la quiere :3 xDD
Y que mas... yo sabia que Shanner queria algo con Tedra...es solo cuestion de tiempo :3 Oie, de donde sacas tanta imaginacion!!!! Ya la venganza se nos entremesclo con el Oraculo OwO Te felicito!
Am...que mas... ni idea, espero la contiii :3
Besos!!!!

por **Alice~** Dom Ago 12, 2012 8:28 pm

Dios mio o,o no me esperaba que el rey también deseara a Azalea D: creo que nadie pero que lindo el que Falen sea así de celoso x3 aunque eso es un problema e.é malditos sentimientos .O.Uu
Espero la conti :D onegaisito (? x3

por **~Shia~** Dom Ago 12, 2012 11:42 pm

Para ser sincera tuve que leer como 10 veces la parte del beso con el rey xD no me lo creía,yo que pensaba que el rey nunca traicionaría a su esposa D: pero alguna razón a de tener el rey para besar a Azalea.
Pobre Challen debe de estar muy confundido,pobresito u.u que feo que no sepa nada de su prometida.
Tedra chismosa ¬¬ luego luego con el chisme del beso con el rey,
Que chido lo del Oráculo,que poder tan tremendo.

Aaaaah ya quiero leer la conti
Me fascina tu fic :D

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