Azalea, Flor Del Desierto (Entre El Amor Y El Odio)

por SweeT PrincesS Miér Ago 22, 2012 5:29 am

"La Venganza De Azalea"

PARTE 20

Pasaron tres días en los cuales Azalea se dedicó a conquistar de nuevo a Falon, pero estaba resultando ser demasiado difícil.
Ni siquiera su belleza lo eclipsaba como antes.
¿Qué más podía hacer?
No tenía ni idea de conquistar a un chico tan complicado como lo era Falon en estos momentos.
Estaba acostumbrada a tener a todos los chicos a sus pies con solo un parpadeo.
En fin, esta vez era ella la que tenía que esforzarse para poder tener a Falon.
Al día siguiente, antes de que llegase la profesora, Azalea se reunió con Lilly, Lenoic y Aika.
Desde que Aika había perdido la memoria, era más agradable estar con ella.
En el periodo que durase esa pérdida de recuerdos, serían amigas.

AZALEA: Lenoic, tú que eres el cuñado del rey Zaebard, bien podrías tener clases privadas de aprendizaje. ¿Qué haces aquí entre nosotros?
LENOIC: No-no me gusta for-formar parte de-de la realeza. Me-me siento más cómodo entre la-la gente común.
AZALEA: Oh, ya veo. En cambio a mí me encanta ser princesa y ser el centro de atención.
LILLY: Para los que no pertenecemos a la realeza nos sentimos más libres. Pienso que pertenecer al nivel alto es demasiado estricto.
AZALEA: ¿Tú no eres hija del emperador Rerion?

Al mencionar ese nombre, Lilly agachó el rostro con seriedad.
Azalea se extrañó, ya que esa chica era muy alegre, y no estaba acostumbrada a verla seria.

AZALEA: ¿He dicho algo malo, Lilly?
LILLY: No. Tranquila. Es solo que… No se sabe nada de mi padre. Puede que también haya desaparecido con toda la gente de las naciones vecinas.
AZALEA: Oh, es verdad. Lo siento…
LILLY: No te preocupes, princesa. Tampoco tenía buena relación con él.
AZALEA: ¿Y eso por qué?
LILLY: Desde que murió mi madre, hace ya tres años, mi padre se alejó de mí sin saber yo los motivos.
AZALEA: Vaya…

Lenoic se atrevió a tomar la mano de Lilly, la cual lo miró, sonriendo.
Aika parecía pensativa, y antes de que Azalea pudiera hacerle una broma, la profesora entró en la sala y dio inicio a la materia.
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Tedra se sentía extraña…
Desde que el capitán Shaner había perdido la memoria, ahora todo era diferente.
A ella le agradaba estar con él. Y ya no lo veía como el vulgar guerrero, sino como un chico guapo y fuerte.
La puerta se abrió y entró Cerith, más sonriente que nunca.

TEDRA: ¿A qué se debe tanta alegría?
CERITH: Al salir de la sala de estudios, me encontré a Falon en el pasillo. Pensé…que estaba esperando a Azalea pero me dijo que quería verme a mí.
TEDRA: ¡Oh, eso es fantástico, amiga!
CERITH: Estuvimos paseando y hablando. (^_^)
TEDRA: ¿Y qué te dijo?
CERITH: Que…le parezco una chica muy agradable. Le gusta mi compañía.
TEDRA: Yo sabía que todo saldría bien.

Tras la puerta, estaba Azalea, apretando los puños, con ganas de estallar.
Tedra y Cerith se estaban aprovechando de la pérdida de memoria de Falon. Y eso no podía seguir permitiéndolo.
Muy pronto se encargaría de bajar de esa nube de felicidad a la tonta de Cerith.
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Esa noche, Azalea no bajó a cenar con todos los demás.
No quería volver a ver a Falon prestando tanta atención a Cerith.
Tampoco tenía apetito. Pues se sentía bastante desanimada con cada día que pasaba y la memoria de Falon no volvía.
Kupó y Mog entraron volando por la terraza. Parecían nerviosos.

KUPÓ: ¡Azalea, algo está pasando, kupó!
MOG: ¡Se oye mucho ruido en el bosque del Norte de Aion!
KUPÓ: ¡Se ven destellos de luz dorada, kupó!
MOG: ¡Creo que es una batalla!
AZALEA: ¿Estáis seguros de lo que decís?
MOG: ¡Por supuesto!
AZALEA: Mmm… ¿Qué estará pasando?

La puerta se abrió y entró Challen con una bandeja llena de comida, la cual la dejó sobre el tocador.

CHALLEN: La cena ha estado deliciosa. Os he traído un poco.

La princesa se levantó de la cama y se acercó tanto a Challen que sus narices se rozaron.
Ella lo miraba muy fijamente, con una ceja arqueada. Y él se sonrojó sobremanera.

CHALLEN: ¿Qué…qué ocurre?
AZALEA: ¿Qué viste?
CHALLEN: ¿Eh?
AZALEA: ¿Falon y Cerith estaban sentados juntos?
CHALLEN: Ehm…sí.
AZALEA: ¿Conversaban y reían?
CHALLEN: Sí, Alteza.
AZALEA: ¿Se acercaban demasiado el uno al otro?
CHALLEN: Bueno…se los veía contentos…
AZALEA: Argh.

La joven se paseó por la habitación, tirándose del cabello.
Esta situación estaba acabando con ella.
Tenía los nervios crispados. Quería gritar y tirarlo todo.
Pero era una señorita educada y estaba en contra de los escándalos.
Aunque…escándalo fue cuando se abalanzó sobre Tedra para arrancarle los pelos.
Sonrió con maldad, y Challen parpadeó, sorprendido de ver las expresiones del rostro de su princesa.
En un minuto podía cambiar del enfado a la sonrisa.
Qué chica tan…inestable.

AZALEA: Gracias por la cena, Challen. Pero no tengo hambre.
CHALLEN: ¿Os sentís mal?
AZALEA: No. Bueno, sí. Me duele la cabeza. Pero creo que es de tanto pensar.
CHALLEN: ¿Por qué no os acostáis a dormir?
AZALEA: Sí, será lo mejor.

Se metió entre las sábanas y bostezó.
Kupó y Mog se acostaron a los pies de la cama y suspiraron.
Challen sonrió, apagó la luz y salió de la estancia.
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A la mañana siguiente, los alumnos estaban postrados a los ventanales, mirando la escena que se sucedía en el jardín de entrada al reino.
Los soldados que habían estado buscando el Oráculo, ahora estaban ahí, sujetando a un hombre sucio y herido de muerte.
Azalea no dudó en salir de la sala de estudios para correr hacia el jardín.
Por el camino se topó con el rey Zaebard.

ZAEBARD: ¿Adónde vas, muchacha?
AZALEA: ¿Quién es él?
ZAEBARD: Es lo que quiero averiguar.

Se acercaron a los soldados y Zaebard se agachó para observar de cerca al hombre.
Estaba tan sucio que no podía reconocer quién era. Y tenía heridas por todas partes.

ZAEBARD: ¿Puedes oírme?
HOMBRE: Ma…Majestad…
ZAEBARD: Tu voz… ¿Cian? (Sorprendido).
CIAN: Ne…cesito…vuestro perdón…
ZAEBARD: ¿Se puede saber qué te ha pasado?
CIAN: Es…toy arrepentido…de todo…
ZAEBARD: ¿Quién te ha herido? ¿Qué está pasando?
CIAN: Este mundo…será absorbido…por el…Oráculo…

Tras decir eso, el traidor Cian soltó su último suspiro, recibiendo así a la muerte.
Zaebard se incorporó y miró hacia el horizonte.

ZAEBARD: ¿Qué has hecho, Cian? ¿Qué demonios has hecho?
AZALEA: ¿Qué ocurre? (Acercándose)
ZAEBARD: Creo que esta vez tenéis que iros todos de aquí.
AZALEA: ¿Por qué?
ZAEBARD: Hablaremos de eso en una hora.
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Azalea terminó de hacer el equipaje y pronto se sentó en la cama.
No podía dejar de pensar en la reunión de hacía dos horas.
Zaebard estaba destrozado con todo lo que había hecho Cian.
El mundo entero estaba en peligro por el Oráculo, el cual había empezado por absorber a los habitantes de Aion.
Al parecer, los dioses estaban muy enojados con los humanos y no harían nada por salvarlos de la catástrofe.
¿Pero de qué les servía huir a Azalea y a los demás si el Oráculo se encargaría de destruir el mundo entero?
La puerta se abrió y entró Challen junto a las dos mascotas, las cuales volaron hasta los brazos de la princesa, que los abrazó y los sintió temblar.

AZALEA: ¿Qué os pasa?
KUPÓ: Estamos muy asustados, kupó…
MOG: No queremos desaparecer…
AZALEA: Eso no pasará. Nos iremos muy lejos de aquí.
MOG: La fuerza del Oráculo puede llegar a cualquier parte, ¿verdad?

Azalea no supo qué responder y miró a Challen, el cual se encogió de hombros con impotencia.
Alguien tocó a la puerta y el joven caballero abrió.
Eran Aika y Lilly. Parecían nerviosas.

LILLY: Princesa, tenemos que ayudar a Lenoic.
AZALEA: ¿Qué le ocurre?
LILLY: El rey Zaebard le ha ordenado que coja una espada y que lo acompañe al Sud de Aion.
AZALEA: ¿Para qué?
LILLY: Al parecer, unos extraños esbirros que salen de la nada se están encargando de destruir la ciudad y de atacar a los habitantes.
AZALEA: Pero ayudar a Lenoic, ¿en qué?
LILLY: Él no sabe luchar. Está muerto de miedo. Esos esbirros lo matarán.
AZALEA: ¿El rey sabe eso?
LILLY: Sí. Ha decidido llevarse también a Falon, a Dalden y a Shaner.
AZALEA: Shaner y Falon no tienen memoria. Habrán perdido la práctica de luchar.
LILLY: Lo sé. Todo es tan peligroso. Pero la peor parte se la lleva Lenoic.
AZALEA: Ya veo.
LILLY: Tú, que eres princesa, podrías hablar con el rey y tratar de convencerlo.
AZALEA: Probaré.

Las tres, junto a Challen, se dirigieron hacia el descampado de hierba verde, dónde una nave esperaba a los tripulantes.
Pudieron ver cómo Lenoic temblaba al lado del rey Zaebard.
Falon, Shaner y Dalden parecían más relajados.

AZALEA: Zaebard…
ZAEBARD: ¿Sí? (Volteándose)
AZALEA: No puedes llevarte a Lenoic. Lo necesitamos aquí.
ZAEBARD: ¿Por qué?
AZALEA: ¿Y si nos atacan de nuevo?
ZAEBARD: Voy a dejar a todos los soldados aquí.
AZALEA: Pero necesitamos a un caballero de confianza.
ZAEBARD: Ya tienes a Challen.
AZALEA: Es mejor dos que uno, Majestad.
ZAEBARD: Está bien. Quédate, Lenoic.
LENOIC: S-sí, Majestad…
ZAEBARD: Deja de llamarme así, muchacho. Soy tu cuñado.

Con preocupación, Azalea vio cómo Falon se adentraba en la nave sin mirar atrás.
En ese momento, pudo sentir que extrañaba al Falon de antes. Al de siempre.
Y no solo eso. También extrañaba sus besos, sus caricias. Incluso sus peleas.
Tenía la necesidad de estar con él en todo momento.
A su lado se sentía tan viva…tan deseable…tan bella…
Parpadeó al darse cuenta de que Challen, Lilly, Aika y Lenoic la miraban con curiosidad.
Se sonrojó y se molestó un poco.

AZALEA: ¿Qué pasa? ¿Vosotros nunca os habéis perdido en vuestros pensamientos? (¬ ¬)
LILLY: Sí, pero te veías tan deprimida que nos hemos preocupado.
AZALEA: Bueno, hagamos algo para matar el tiempo.
LILLY: El rey tiene varios juegos de mesa en la biblioteca.
AZALEA: Pues vamos allá.
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Tedra y Cerith estaban en la sala del té, hablando sobre temas de belleza, vestidos y hombres.

TEDRA: Me alegro tanto de que al fin puedas estar bien con mi hermano.
CERITH: Sí. De nuevo vuelvo a sentir esa ilusión de conseguir el amor de Falon.
TEDRA: Y lo tendrás. Tenlo por seguro.
CERITH: Es tan bonito estar enamorado…
TEDRA: Y mucho más bonito es ser correspondido.
CERITH: Ehm… Tedra… Quería preguntarte algo…
TEDRA: ¿Mm?
CERITH: ¿Te gusta…el capitán Shaner?

Tedra se sonrojó y le tembló tanto la mano que estuvo a punto de derramar el té.
Cerith agachó el rostro, ocultando una sonrisa.

TEDRA: ¿Por qué me preguntas eso?
CERITH: Siempre te veo a su lado.
TEDRA: Es para que no se sienta tan solo ahora que no tiene recuerdos.
CERITH: ¿Desde cuándo te interesa su soledad?

Tedra dejó la tacita sobre la mesa y no respondió.
Se sentía bastante incómoda, pero Cerith le tomó la mano para tranquilizarla.

CERITH: Somos amigas, Tedra. No tienes que fingir ante mí.
TEDRA: Yo…no estoy fingiendo.
CERITH: Shaner siempre te ha gustado, ¿verdad?
TEDRA: Dices tonterías, Cerith.
CERITH: No quieres admitirlo porque él solo es un simple guerrero. Te conozco y sé que jamás estarías con alguien de la baja clase social.
TEDRA: Exactamente.
CERITH: Pero en el corazón nadie manda, amiga. Y por mucho que quieras ocultar tus sentimientos, llegará el día en que no puedas más y explotarás.

Tedra miró a su amiga en silencio, aguantando las ganas de decirle todo lo que pensaba y sentía con respecto a Shaner.
Pero para ella primero estaba su puesto como princesa, su imagen y después su corazón.
Tedra jamás avergonzaría a sus padres enamorándose de un simple guerrero.
Pero Cerith tenía razón. Llegaría un día en que no aguantaría más.
Y Tedra tenía que evitar que llegase ese día. ¿Pero cómo?
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Azalea, Challen, Lenoic, Aika y Lilly jugaron a juegos de mesa en la biblioteca hasta que llegó la hora de la cena.
Al salir al pasillo, encontraron a todos los soldados dormidos en el suelo.
Reinaba un extraño silencio en toda esa parte del castillo.

AZALEA: ¿Qué está pasando aquí?
LILLY: Parece ser que se han puesto de acuerdo en echar una siesta.
AIKA: ¿Todavía no han regresado el rey y los demás?
AZALEA: Pues quién sabe. Echemos un vistazo.

Se recorrieron esa parte del reino, pero efectivamente todavía no habían regresado. Y todos los demás soldados también dormían en el suelo.

AZALEA: Esto no es normal…
LILLY: Sí, eso vemos.

De pronto, se oyó el grito de una chica, y los cinco fueron hacia la sala del té.
Al entrar, vieron a un ser pequeño y encapuchado de pie sobre la mesa, señalando a Cerith con la palma de la mano.
Tedra yacía desmayada en el suelo.

AZALEA: ¿Quién eres tú?

El diminuto encapuchado desvió su mano hacia Azalea, y Challen se puso frente a ella para protegerla.

AZALEA: Espera, Challen. Parece un niño…
CERITH: No es un niño normal y corriente.
AZALEA: ¿Qué?
CERITH: Mira cómo ha dejado a Tedra. Y a los soldados que había en la puerta. Y también a la sirvienta que salió hace un minuto.
AZALEA: ¿Qué les ha hecho para que estén inconscientes?
CERITH: Ha usado la magia.

De la palma de la mano de ese encapuchado salió un rayo negro que electrocutó a Challen y lo dejó desmayado en el suelo ante las atónitas miradas de los demás.
Antes de que siguiera atacando, las puertas del ventanal se abrieron de golpe y apareció un chico rubio con sombrero de orejas de perro, el cual usó su capa para cubrir al pequeño encapuchado y hacerlo desaparecer como por arte de magia.
Azalea, Lilly, Aika, Cerith y Lenoic parpadearon con asombro, por lo que el desconocido los miró con sorna.

CHICO: ¿Nunca habéis visto a un cazador de bestias?
AZALEA: Ehm…sí. Pero con sombrero de orejas de gato.
CHICO: Ya veo. ¿Iba acompañado por una bella chica de cabello rosa?
AZALEA: Así es.
CHICO: Maldito Frey…
LILLY: ¿Eres compañero de Frey y de Moira?
CHICO: ¡Jamás seré compañero de alguien que me robó a mi bella flor!

Dicho eso, volvió a ponerse la capa y se fue por el ventanal.
Poco a poco, Tedra y Challen fueron despertando, y se miraron unos a otros.
¿Qué estaba ocurriendo realmente en Ciudad Aion?
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Azalea dormía plácidamente junto a sus mascotas, ya que era la segunda noche que no padecía pesadillas, pero unos fuertes golpes interrumpieron su angelical sueño.
Se levantó de la cama y salió al pasillo, bostezando.

AZALEA: ¿Se puede saber qué…?

Alguien se abalanzó sobre ella y le tapó la boca con un pañuelo húmedo.
En pocos segundos, quedó dormida.
Cuando despertó, se vio atada de pies y manos en una silla, dentro de la biblioteca.
A su alrededor estaban también amordazados todos sus compañeros de estudios, incluidos Challen, Tedra y Cerith.
Todos parecían confundidos y no dejaban de murmurar.

AZALEA: ¿Qué está pasando?
TEDRA: Nos han secuestrado. ¿Qué no ves? (¬ ¬)
AZALEA: Pero…si este reino está lleno de soldados…
TEDRA: Estarán echándose otra siesta.

Todos continuaron murmurando hasta que la puerta se abrió y entró un hombre calvo y gordo, que los miró con expresión furibunda.

HOMBRE: Ya que estáis todos despiertos, os comunicaré que soy el emperador Yimbo del Este de Aion. Tengo a todos los soldados acorralados por mi ejército y nadie vendrá a ayudaros.
TEDRA: ¿Por qué nos tienes atados? Que sepas que soy la princesa de Kan-is-Tra.
YIMBO: Sí, preciosa. Lo sé. Por eso esperé a que Zaebard se fuera para tenderle una trampa.

Todos se sorprendieron de que ese emperador se atreviera a atacar a su propio rey.

YIMBO: Nadie será liberado hasta que Zaebard me entregue a Cian.
AZALEA: Ese traidor murió.
YIMBO: ¿Qué?
AZALEA: Llegó malherido y soltó unas palabras antes de morir. El rey lo enterró en el jardín trasero.
YIMBO: No puede ser… ¡Maldita sea!
AZALEA: Así que ya nos puedes ir soltando.

El gordo emperador miró con mala cara a Azalea y a Tedra, ya que ellas habían sido las únicas en hablarle con impertinencia.
Pero quizá decían la verdad sobre Cian, ya que había registrado el castillo entero y no lo había encontrado.
Dio un silbido y por la puerta entraron dos guardias con armadura negra.

YIMBO: Encargaros de llevar a esas dos señoritas… (Señalando) a la habitación de Zaebard.

En cuanto los dos guardias cogieron a las dos chicas, Challen se puso nervioso e intentó soltarse, pero fue en vano.
Con impotencia vio cómo se llevaban a su princesa.
Si algo le ocurría, jamás se lo perdonaría.
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TO BE CONTINUED...

por **Alice~** Miér Ago 22, 2012 2:17 pm

OMG ! º_º había estado esperando tu capítulo & me encanto :3

por **~Shia~** Miér Ago 22, 2012 2:55 pm

Muy buen capitulo me a fascinado :D siempre que intento imaginarme que pasara nunca le atino xD
Por eso me encanta tu fic es distinto no es igual a los otros y eso lo hace especial.
Muy buena imaginación la tuya,felicidades !!!

por SweeT PrincesS Jue Ago 23, 2012 3:13 am

Gracias...
Las amo chicas !!

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Azalea, Flor Del Desierto (Entre El Amor Y El Odio)

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