Azalea, Flor Del Desierto (Entre El Amor Y El Odio)

por SweeT PrincesS Lun Ago 27, 2012 5:09 am

"La Venganza De Azalea"

PARTE 22

Shaner y Tedra bailaban al son de la nueva melodía, y ella se sentía extrañamente femenina entre los brazos de ese hombre.
Aunque…pensándolo bien…era la primera vez que se sentía así ante un chico. Y nunca nadie la había besado todavía.
¿Qué sería ser besada por los labios de Shaner?

SHANER: Estás preciosa hoy.
TEDRA: Oh…gracias…

El corazón le dio un vuelco.
Muchos chicos le habían dicho lo hermosa que era, pero con éste guerrero se sintió desfallec
er.
Impulsivamente, Tedra se pegó más a él, sintiendo su pecho duro y cálido.
De pronto, las piernas le temblaron.

SHANER: Jamás me dijiste si estás prometida o casada.
TEDRA: Ehm…yo…no… Yo estoy soltera. (///)
SHANER: ¿Cómo es posible eso con lo bella que eres?
TEDRA: Pues…hay muchos chicos que me han pedido matrimonio, pero ninguno me ha interesado.
SHANER: Entonces a mí me queda una esperanza.

Tedra se mareó y Shaner la sujetó, preocupado.

SHANER: ¿Estás bien?
TEDRA: Sí…

Se miraron fijamente, y por primera vez, ella sintió las ganas de ser besada. Pero Shaner no lo hizo, ya que había demasiada gente presente.
Y Tedra se quedó con las ganas.
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La fiesta seguía con buen ambiente, y todos parecían divertirse menos Azalea, que yacía sentada al lado del rey y de Challen.
Estaba atacada de los nervios, pues Falon y Cerith seguían sin aparecer.
Por suerte, había enviado a Kupó y a Mog a buscarlos por todo el reino.
Zaebard se inclinó hacia su oído.

ZAEBARD: ¿Aburrida?
AZALEA: ¿Eh? No, no. Estoy bastante distraída.
ZAEBARD: Tu hermosa cara no dice lo mismo.
AZALEA: Ehm…
ZAEBARD: ¿Falon te tiene preocupada?
AZALEA: Yo…
ZAEBARD: Te estás angustiando por nada. Por mucho que no te recuerde, jamás lo perderás. Es la primera vez que se enamora. Y tú ahora eres su aire.

Esas palabras consiguieron emocionar tanto a la princesa que pudo calmarse un poco.
¿Pero por qué el rey le decía todo eso?
Al parecer, sabía leer muy bien las expresiones del rostro de Azalea.
Lo miró de reojo y lo notó pensativo, tal vez un poco triste.
¿Sería por todo lo que había pasado con el Oráculo? ¿Tal vez por la muerte de Cian? ¿O quizá lo angustiaba la idea de que su mujer y sus dos hijos hubieran desaparecido con toda la demás gente?
Se fijó en que el rey estaba pendiente de todo el mundo, pero nadie lo estaba de él.
Entonces se sintió identificado con Zaebard.
Por otro lado, Kupó y Mog encontraron a Cerith en su habitación.
Aterrizaron sobre la cama y la miraron con tristeza.

KUPÓ: ¿Por qué lloras, kupó?
CERITH: ¿Qué hacéis aquí?
KUPÓ: Bueno…volábamos por el castillo y…oímos tu llanto, kupó.
MOG: ¿Por qué estás llorando?
CERITH: Por nada. No deberíais de estar aquí. Si Azalea se entera, os regañará.
MOG: Ella no se enterará. Pero…ya que estás sola…te dejaremos tranquila.

Las dos mascotas volaron hasta la ventana abierta, pero al oír que Cerith volvía a llorar, se voltearon para mirarla y hablar en susurros.

MOG: No podemos dejarla así. Ella es una chica muy dulce.
KUPÓ: ¿Y qué podemos hacer, kupó?
MOG: Calmarla un poco, ¿no?

Regresaron al lado de la joven y Mog le ofreció una de las plumas de sus pequeñas alas y Cerith sonrió, secándose las lágrimas.

MOG: ¿Nos dirás por qué lloras?
CERITH: No tiene importancia.
MOG: Ahora para nosotros sí la tiene.
CERITH: Sois amigos de Azalea, así que no tiene sentido que os lo cuente.
MOG: Siempre es bueno desahogarse.

Cerith suspiró y al fin dejó de llorar.
Kupó y Mog la miraron fijamente, a la espera de que la chica comenzase a hablar.

CERITH: Os quedaréis hasta que os lo explique todo, ¿verdad?
KUPÓ Y MOG: Así es.
CERITH: Bueno, Azalea me dijo cosas que me dolieron y…
KUPÓ: Ella no es mala persona, kupó. Solo que…
CERITH: Tranquilo, lo sé. Dijo cosas dolorosas pero ciertas. Lloro por desánimo, más que nada. Entiendo su fuerte carácter pero…no comprendo por qué me odia tanto. Yo no le he hecho nada.
MOG: Te odia porque eres amiga de su peor enemiga: Tedra.
CERITH: ¿Y por qué la odia tanto?
MOG: Es una historia muy larga.
CERITH: Si me la contáis, quizá pueda entender a Azalea.
KUPÓ: No creo que sea buena idea, kupó.
CERITH: Prometo guardaros el secreto.

Las dos mascotas se miraron, dubitativas, pero con la radiante sonrisa que Cerith les dedicó, logró convencerlas.

KUPÓ: Todo comienza con el pasado de nuestra Azalea, kupó…
MOG: Fue una niña poco agraciada. Le gustaba estar sola y era muy rebelde.
KUPÓ: Los niños no se acercaban a ella por temor a su carácter altanero, kupó.
MOG: Pero llegaron dos niños que se atrevieron a acercarse a ella: Falon y Tedra.
KUPÓ: Y solo se acercaban para burlarse de su aspecto y hacerle la vida imposible, kupó.
CERITH: Oh…qué horrible…
KUPÓ: Sí, kupó…
CERITH: ¿Y por qué hacían eso?
KUPÓ: No lo sabemos. Ni siquiera Azalea llegó a saber por qué la torturaban, kupó.
MOG: Un día, Falon y Tedra tuvieron que viajar a esta ciudad para iniciar sus estudios. Entonces Azalea pudo respirar tranquila.
KUPÓ: Pero su tranquilidad duró poco, kupó. Pues comenzó a tener pesadillas cada noche que siguieron torturándola, kupó.
CERITH: Causadas por todo lo que Falon y Tedra provocaron en ella.
KUPÓ: Así es, kupó. El odio siempre estuvo ahí. Mutuo y desde el primer día. Los tres crecieron odiándose, kupó.
CERITH: El odio de Azalea está justificado, pues la amargaron cruelmente. Pero no comprendo por qué Falon y Tedra la han odiado tanto.
KUPÓ: Nadie lo comprende, kupó.
CERITH: Hay algo…que entiendo menos…
MOG: ¿Cómo qué?
CERITH: Si Falon y Azalea se odian tanto… ¿Por qué hora parece ser que se quieren?
MOG: Bueno, los humanos sois así. Azalea dice que del odio al amor hay solo un paso.
CERITH: Oh…me acordé de algo…
KUPÓ Y MOG: ¿Mm?
CERITH: Tedra me contó que Azalea no es la verdadera princesa de Krystán, sino una chica adoptada. ¿Es eso cierto?

Kupó y Mog tragaron saliva al oír eso.
Estaban llegando a terreno peligroso, así que se alzaron al aire con sus diminutas alas y sonrieron.

KUPÓ: Nos alegramos de que hayas dejado de llorar, kupó.
MOG: Espero que ahora puedas comprender un poco más a Azalea. Adiós.

Y salieron por el ventanal, dejando a Cerith muy pensativa.
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Azalea al fin localizó a Falon, el cual había entrado solo al salón.
Contenta de verlo sin Cerith, se disculpó ante el rey y se dirigió hacia Falon.

AZALEA: Hola, Falon.
FALON: Ah, hola.
AZALEA: ¿Dónde has estado todo este rato?
FALON: En el establo. Me gustan los caballos.
AZALEA: A mí también. ¿Quieres que salgamos a cabalgar?
FALON: Ya he cabalgado un rato.
AZALEA: Oh… Entonces bailemos.
FALON: En otra ocasión. Ahora estoy buscando a una persona que hace rato no veo.
AZALEA: ¿Te…refieres a Cerith?
FALON: Sí. Tedra me dijo que no se sentía bien, pero que llegaría a la fiesta. Pero todavía no ha llegado.
AZALEA: Ya veo que…te gusta de verdad.

Falon la miró de reojo, sabiendo que esa chica se sentía herida. Pero no debía olvidar las palabras de Tedra ni la cruel forma en la que Azalea trató a Cerith.
Esta chica no le convenía…

FALON: Siento mucho que tú y yo hayamos tenido algo y que ahora yo no recuerde nada, pero quién me gusta es Cerith y quisiera vivir el presente.

Esas palabras fueron como puñaladas para el alma de Azalea.
Apretó los puños y retrocedió un paso.

AZALEA: ¿Qué pasará si…recuperas la memoria?
FALON: No lo sé. Lo siento.

Dicho eso, se alejó.
La princesa estuvo largos minutos sola en medio del salón de baile, con la mirada perdida, sin saber qué hacer.
Todo su mundo se había venido abajo en cuestión de segundos, al igual que sus planes de venganza.
Tantos años de sufrimiento… Tanto tiempo sacrificado en planes… Tantos momentos dedicados a seducir a Falon…
Todo eso ya no servía para nada.
Había perdido tiempo en algo que creyó que la liberaría del odio.
Había perdido las ganas de seguir intentando recuperar a su príncipe.
Había perdido a Falon…
Había perdido su corazón…
¿Por qué le dolía tanto? ¿Por qué sentía que su alma sangraba?

CHALLEN: Alteza…

Esa cálida voz…esa mano en su hombro…esa persona que siempre estaba a su lado en los peores momentos…
Era el ángel de la guarda de sus sueños.

AZALEA: Challen.
CHALLEN: ¿Sí?
AZALEA: Sácame de aquí. Llévame lejos.
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Sentados en el jardín bajo la noche estrellada, estaban Challen y Azalea, la cual lloraba desconsoladamente sobre el pecho de su caballero personal.

AZALEA: Todo iba bien...y no entiendo por qué me duele tanto el corazón…
CHALLEN: …
AZALEA: No solo me siento frustrada por haber fallado en la venganza, sino que me siento vacía…y no sé por qué…

Volvió a llorar con una agonía que estaba matando a Challen.
No soportaba verla sufrir, y mucho menos tenerla entre sus brazos tan triste y frágil.
Esta situación le recordaba a aquella noche en la que Zannaleah lloró en sus brazos para despedirse de él.
Cerró los ojos unos segundos para calmar el dolor de la espina que aun tenía clavada en el corazón.
Cuando los abrió, vio que Azalea lo miraba con la cara llena de lágrimas.
Qué hermosa era… Pero cómo dolía verla llorar…

AZALEA: ¿Por qué siento que me falta algo, Challen? ¿Por qué siento que me ahogo en un dolor desconocido?
CHALLEN: Yo también me sentí así cuando Zannaleah me abandonó. Perdí el camino. Mi vida siguió sin rumbo alguno.
AZALEA: ¿Y qué te ha hecho calmar ese dolor?
CHALLEN: El tiempo, quizá. El dolor puede menguar, pero los recuerdos se quedan ahí, olvidándose del olvido.
AZALEA: Yo no quiero vivir de recuerdos. Eso es peor.
CHALLEN: No hay cura para los recuerdos, Alteza.
AZALEA: Quisiera que los Cazadores de Bestias borrasen toda mi memoria.

Esas palabras lastimaron a Challen y no supo por qué.
Quizá porque volvió a sentir que perdía a Zannaleah una vez más al poder perder también a Azalea.
Suspiró y con su dedo secó las lágrimas de la princesa.

CHALLEN: No digáis eso, Alteza. Borrar toda vuestra memoria sería olvidar a vuestros padres, a vuestras mascotas, a vuestros amigos…a mí…

De nuevo, la chica rompió a llorar sobre el pecho del caballero, el cual no dejó de abrazarla y de acariciarle el cabello.

AZALEA: Perdóname, Challen…
CHALLEN: ¿Por qué?
AZALEA: Por hacerte aguantar mis berrinches llenos de tristeza.
CHALLEN: Mi obligación es estar con vos en lo bueno y en lo malo.
AZALEA: Gracias por escucharme. Gracias por haber aceptado estar a mi lado. Quiero que sepas que para mí no solo eres mi caballero y protector…
CHALLEN: Alteza…
AZALEA:…eres mi mejor amigo junto a Kupó y a Mog. Y no quiero perderte. No quiero que te vayas de mi vida.

El corazón de Challen dio un gran vuelco, y tuvo que apartarse de ella antes de que cometiera la locura de besarla.
Por todos los dioses… Cada vez era más difícil poder controlar sus sentimientos.
Unos sentimientos que todavía pertenecían a Zannaleah. O eso creía.
La princesa lo miró, preocupada.

AZALEA: ¿He dicho algo malo?
CHALLEN: No, Alteza. Solo me he…emocionado. Gracias por vuestras bellas palabras. Gracias por apreciarme tanto.
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Cerith estaba a punto de acostarse a dormir, pero alguien tocó a la puerta.
Dio paso y se sorprendió al ver que era Falon y no Tedra tal como esperaba.

FALON: Veo que ibas a dormir… Podemos hablar mañana.
CERITH: No, espera. No te preocupes. Pasa.

El chico entró y cerró la puerta, provocando los nervios de Cerith al estar los dos solos dentro de la habitación.

FALON: Te…has perdido toda la fiesta.
CERITH: Lo sé. Hoy no me he sentido bien.
FALON: ¿Estás enferma?
CERITH: No. Solo un poco desanimada.
FALON: ¿Ha pasado algo?
CERITH: No. Pero dime, ¿de qué querías hablar?
FALON: De ti y de mí.

El corazón de la chica se aceleró bruscamente.
Siempre había soñado con este momento, con estas palabras, con este príncipe.
Pero entonces recordó las palabras de Azalea: “Te aconsejo que dejes de ilusionarte con Falon. Tú, yo y todos sabemos que me ama a mí. Si está por ti es porque perdió la memoria, pero en cuanto la recupere, regresará a mi lado. No tienes nada que hacer”.
Agachó el rostro y aguantó las ganas de llorar.
Falon se sentó a su lado en la cama y tomó su delicada mano entre las suyas más fuertes.

FALON: Cerith, tengo que confesarte que para mí no es fácil vivir sin recuerdos. Es frustrante no recordar nada de mi infancia, de mis padres, de mi hermana. Y pensar todo el día en eso me está provocando depresión. Por eso he decidido vivir el presente.
CERITH: Yo…
FALON: Un presente en el cual ahora estás tú.

Cerith comenzó a temblar.
Eso parecía una declaración de amor.
Había esperado más de seis años para oír eso.
Y por más feliz que se sentía en ese momento, sabía que no era del todo real.
Tenía que ser fuerte y aclarar las cosas.

CERITH: Falon, yo…
FALON: Me gustas mucho, Cerith.
CERITH: Y tú a mí, pero lo nuestro no puede ser.
FALON: ¿Por qué no?
CERITH: No quiero sufrir más de lo que ya he sufrido por ti. No quisiera aferrarme a esta ilusión para luego caer cuando recuperes la memoria.
FALON: Cerith…
CERITH: Tú siempre has estado interesado en Azalea, y ella no se merece esto.
FALON: ¿Cómo puedes defenderla después del modo en que te trató?
CERITH: Porque no tiene la culpa de tu pérdida de recuerdos.
FALON: Esa princesa es demasiado presumida y arisca. No me gusta su carácter.
CERITH: Pero así la aceptaste. Así te enamoraste de ella.
FALON: Eso ahora no me importa. Disfrutemos del presente, por favor. Quiero estar contigo.

Se miraron fijamente hasta que Cerith se sintió perdida.
No podía negarse. No podía decirle que no.
A pesar de que él hubiera perdido la memoria, a pesar de que Azalea la había advertido de que saldría perdiendo, a pesar de todo, Cerith no podía rechazar al amor de su vida. Pues el destino le estaba concediendo una oportunidad.
¿Debería aprovecharla? ¿Debería arriesgar su corazón a sangrar de nuevo?
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Al día siguiente, después de clase, Azalea, Challen, Lenoic, Lilly y Aika estaban sentados en el jardín, disfrutando de un picnic bajo el sol.

LILLY: En dos meses llegará el verano y podremos disfrutar de la playa.
AZALEA: ¿Y dónde queda el mar?
LILLY: En el Sud de Aion. Allí siempre hace calor. Pero no se sabe por qué el agua del mar está tan frio y nadie puede bañarse. Por eso debemos esperar al verano.

Vieron que se acercaba el rey junto al hombre que era pintor de retratos, llamado Ladak.
De inmediato, los cinco jóvenes se incorporaron para hacer una reverencia.

ZAEBARD: Buenas tardes, muchachos. He venido por la princesa Azalea.
AZALEA: Oh…
ZAEBARD: Creo que quedó algo pendiente entre tú y mi amiga Ladak.
AZALEA: Ah, sí… Es cierto.
LADAK: Si todavía queréis…
AZALEA: Sí, claro que sí.
ZAEBARD: Podéis usar la torre que da al sol. Allá habrá bastante luz.
LADAK: Gracias, Zaebard. Pero que sea la princesa la que decida cuándo iniciar.
AZALEA: ¿Podría ser antes de cenar?
LADAK: Como deseéis, Alteza.
ZAEBARD: Azalea, quería hablar contigo a solas. ¿Podrías acompañarme?
AZALEA: Por supuesto.

Mientras el pintor Ladak conversaba con Challen, Lenoic, Aika y Lilly, los otros dos se alejaron paseando por el inmenso jardín.

ZAEBARD: ¿Cómo has seguido después de la fiebre?
AZALEA: Bien, gracias.
ZAEBARD: Me alegro. En fin, lo que quiero hablar contigo se trata de Falon.
AZALEA: …
ZAEBARD: Sé todo lo que está pasando. Y he venido para informarte de que Falon…ha cancelado vuestro compromiso.

Azalea dejó de caminar y apretó los puños.
Zaebard se detuvo y la miró con atención.
Era una princesa demasiado hermosa y joven como para tener ese carácter de hierro.
Verla así, aguantando las ganas de llorar, haciéndose la fuerte, le hizo recordar a aquella niña fea que fue objeto de burla por todos los niños, pero que en ningún momento se derrumbó.
En aquél entonces deseó abrazarla, pero ahora deseaba mucho más que eso.
Su belleza lo tenía eclipsado, y haber probado sus labios aquella vez fue un error.

ZAEBARD: No te angusties, Azalea. Todo esto será temporal.
AZALEA: O quizá eterno.
ZAEBARD: Confiemos en los Cazadores de Bestias. Debemos esperar.
AZALEA: ¿Hasta cuándo? ¿Hasta que Falon se case con Cerith y tengan hijos?

El joven rey no supo qué más decir, así que la miró largamente hasta que se atrevió a acercarse a ella para sentir su aroma a flores.
Esa princesa era la tentación en carne y hueso.
Solo con mirarla se olvidaba de su esposa.
Pero en los ojos de la chica podía leer algo más que dolor…

ZAEBARD: Estás enamorada de Falon, ¿verdad?

Azalea parpadeó, sintiendo que toda la sangre de su cuerpo se agitaba en sus venas, provocándole un leve rubor en las mejillas.
Su mente volvió a imaginar a su Falon y a Cerith amándose y riendo. Y de nuevo sintió presión en el pecho.
¿Pero por qué?
Lo odiaba. Y él a ella. Solo anhelaba vengarse y verlo sufrir.
¿Entonces por qué sentía dolor? ¿Por qué quería llorar?
Se pasó las manos por el cabello, agobiada.

ZAEBARD: Cuando Falon descubrió que estaba enamorado de ti, se sorprendió tanto que no quiso aceptarlo al principio. Entendí su opinión porque jamás quiso enamorarse de nadie. Él adoraba su libertad. Pero, dime, Azalea, ¿por qué no quieres aceptar que lo amas?

Azalea tuvo ganas de contarle toda la verdad.
La verdad sobre que Falon la amaba porque creía que era una chica adoptada.
Si llegase a descubrir que era la verdadera Azalea, la miraría con asco y la abandonaría.
Entonces, el miedo que sintió al pensar en el abandono de Falon, al fin la hizo llorar.
A Zaebard se le removió el alma al verla derrumbarse, e hizo lo que no pudo hacer hacía ya seis años.
La abrazó.
Y sentirla suave y delicada en sus brazos fue algo maravilloso.
Había tenido a muchas mujeres en sus manos, en su cama. Pero a ninguna había deseado tanto como la deseaba a ella.

ZAEBARD: Dime por qué lloras, princesa.
AZALEA: No quiero sentir este sentimiento…
ZAEBARD: ¿Por qué no?
AZALEA: Porque odio a Falon. Me ha hecho mucho daño…
ZAEBARD: Pero ahora lo amas, Azalea. Y contra el amor no se puede luchar.

La apartó para mirarla fijamente.
Era tan bella…

ZAEBARD: Aguanta un poco más. Ten fe. Y disfruta de ese amor hasta dónde dure.
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TO BE CONTINUED...

por **~Shia~** Lun Ago 27, 2012 8:33 pm

*-* hasta el rey esta enamorado de Azalea, ella tiene a todos menos al que quiere,a Falon u.u pobresita
Zaebard y Challen hasta Dalden ya me caen mejor que Falon

Muy buen capitulo,espero conti :D

por **Alice~** Lun Ago 27, 2012 10:44 pm

Jashin *O* todo el día (estaba en la escuela) anhelaba llegar a leer lo último (que no me dio tiempo de terminarlo xD) me encanto *3* hoy frente a la clase dije que el amor es una perdida de tiempo & ahora que leo esto ... Tal vez hize mal en decirlo ... & en un futuro me encuentre como Azalea, no queriendo aceptar lo que realmente es ... Así que en serio ... Tu fic me hace pensar que todo es bello, aún los problemas lo son pero hay que intentar disfrutar todo C:

por SweeT PrincesS Mar Ago 28, 2012 3:02 am

Las Amo Chicas!!!!!

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