Asfixia. 8. Aunque las cosas buenas no vengan consecutivamente, las malas sí.

--Pierdo el control, me ausento, comienza a asfixiar tu respiración, siento el dolor... de... tus besos, cierro los ojos tiemblo y miento. Quisiera gritar quisiera decir que ya estoy lejos, que ya no estoy... explícalo tu, yo, no entiendo, lo que me haces me haces tu, ha llegado muy lejos, lo que me haces tú, me haces tú... -- Elli Noise--


Esas inexplicables sensaciones que me provocaban, que me hacen perder la razón, experimentar cosas que jamás creí, que me lleve hasta tocar el cielo, que me pierda en él, en sus manos que recorren con descaro mi cuerpo, que sus labios abusen de los míos, que manche mi piel, marque mi cuerpo como si le perteneciera.


Lo odio, lo detesto, no lo aguanto, odio que me provoque esto...


De un momento a otro y sin tener en cuenta cómo y cuando ya se veían a nuestros cuerpo desnudos sobre la amplía cama. Unas pálidas y toscas manos viajaban por todo mi cuerpo, acariciando mis piernas hasta llegar a estrujar mis pechos. Hundiendo su rostro en mi vientre descargando un sin fin de besos.


Los gemidos que tanto me esforzaba por reprimir a cierto punto se hicieron presentes. Mantenía mis ojos cerrado tratando de no aceptar lo que ocurría, mis manos aferrándose a las sábanas en un intento de soportarlo todo.


Lo sentí descender, deslizando hacia abajo su húmeda lengua por mi vientre, pasando por mi ombligo mientras sus manos abrían mis piernas, ahí lo sentí, me estremecí al contacto, su lengua lamiendo mi intimidad.


-¡No... Espera... eso no...!


Sentía mis mejillas arder no solo por el calor que ya en si envolvía mi cuerpo, también se le sumaba la vergüenza de lo que estaba ocurriendo. Parecería normal en actos como este pero, es algo muy fuerte, el que este entre mis piernas practicándome sexo oral me parece otro nivel.


No puede ser peor, extrañamente en esta ocasión me sentía más húmeda, me enloquecía a más no poder sentir su lengua moviéndose en círculos sobre mi clítoris provocando un cosquilleo en esta área, hundiendo su lengua en mi entrada sin pudor alguno.


Delirante, ya no podía más, mi cuerpo se sentía al máximo al sentir al sentir las oleadas de placer sofocándome, un fuerte rubor cubría mi rostro, mi respiración descontrolada y el sudor se hacía presente en nuestro cuerpo.


De un momento pauso su tarea oral dejándome jadeante pero sin perder la atención de la zona ya que continuó masturbándome con su mano, movía sus dedos ágilmente sobre mi empapada vagina.


Me miro atento disfrutando de las reacciones de mi sínico cuerpo ante sus caricias, viéndose satisfecho por la vista que solo alimentaba su orgullo.


-No importa lo que digas o cuanto te niegues siempre disfrutas esto... masoquista...


-Cállate... yo no...


-¿Desearías que fuera Itachi quién te hiciera esto? ¿Qué fuera él que te tocará de esta manera?


-Estúpido... sí, desearía que fuera él quien me tocara... ahh... que me hiciera perder la razón... ahhh... que me follara tan fuerte hasta desgarrarme por dentro...


Le molesto, mi declaración le molesto al grado de que la sonrisa que antes estaba formada en us rostro de borro de golpe, aunque, no creo que fuera buena idea decirlo.


Me jalo con brusquedad, ambos ya de pie sometiéndome frente a la puerta de la habitación, la cual tenía un largo espejo de cuerpo completo, apoye mis manos en este para evitar algún tipo de accidente, justo después de eso lo sentí, sentí como entro de una sola con una fuerte embestida a la cual le siguio otra, una y otra vez entraba con fuerza sin darme un respiro si quiera.


-Itachi... -susurré por lo bajo imaginándome que esto ocurría con él y tratando de pisar en orgullo del Uchiha menor.


-Lastima... -me tomo por lo cabellos de mi nuca jalándolo hacía atrás causando que viera directamente al reflejo en el espejo -mira tú expresión... realmente disfrutas esto...


Mis mejillas se veían rojizas, mi boca entreabierta dejando escapar un hilillo de saliva que viajaba hasta mi cuello, gritando y gimiendo por dicho placer, ¿realmente lo disfruto? Cerré mis ojos con fuerza, no soportaba ver esa humillante imagen de mi misma.


Tenía razón, de alguna forma él me cambia, el es el culpable de lo que sucede, el es el responsable de todo esto.


Las embestidas continuaban mientras mis ojos se mantenían aún cerrados, sin lugar a dudas una y otra vez me provocaba un placer delirante.


Se detuvo, de un momento hubo un cambio de posición, sin preocuparme por saber cómo ambos quedamos en el piso, sentado con las piernas flexionadas mientras yo me veía sobre él apoyando al suelo mis piernas y sujetándome por su cuello.


El movía sus caderas hacía arriba mientras yo lo ayudaba en una especia de sentadillas alcanzando algún punto más profundo en mi interior.


Ya no era si negarme o no, si lastimar su orgullo o dejar que se burlara de mí, solo importaba el momento, esa situación orgásmica y llena de depravación.


Lamía mi cuello, mordía con fuerza mis hombros haciéndome, en ocasiones, sangrar, nuestros cuerpo se veían envueltos en una cama de sudor, pequeñas perlas saladas se deslizaban por mi cuello hasta perderse en el escote de mis senos.


-Dilo... hazlo de nuevo... di su nombre, eso no cambiara nada...


Aún a este punto seguía de orgulloso, -no cambiara nada- lo sé, no espero que cambia algo, pero, aunque quisiera decirlo, algo me lo impedía, una presión en mi pecho, un nudo en la garganta en un intento de decirme que no arruinara las cosas.


-Onegai... -susurro contra mi cuello -dilo... -lo sé, sé lo que quieres escuchar.


Cerré mis ojos dejándome llevar, me aferre a su espalda con fuerza enterrando mis uñas con fuerza, deje que mi razón hablara y mi garganta dejo escapar esas palabras...


-Sasuke... -gemí -Sasuke... Sasuke... Sasuke...


¿Qué extraña satisfacción provoca el que tu -amante- diga tu nombre en el acto? Te lleva a sentir diferentes cosas en el momento, porque de alguna formar ese hecho te une con el otro, tan satisfactorio que solo eso basta con llevarte al éxtasis.


No podía reprimirme, tenía ganas de gritarlo, cansarme gimiendo su nombre.


La sensación, la posición, el momento, todo estaba en mi contra llevándome al momento del éxtasis donde mi cordura se iba perdiendo. Era excitante, fascinante, erótico, jamás pensé que tantas cosas me fueran a llevar a este momento, mi vista se nubla y las sensaciones provocadas se encontraban al máximo.


-Me... vengo... -susurre entre gemidos.


Con una última embestida que me provoco aferrarme a él, abrazar sus caderas con mis piernas juntando nuestros cuerpos. Ambos jadeantes a causa de tanto placer, dejando descargar todo su tibio semen en mi interior que lo oprimía por completo.


Caímos exhaustos y calientes por lo ocurrido, una experiencia demasiado satisfactoria para seguir quejándome.


Seguía abrazándolo, no quería dejar de sentir ese calor que envolvía nuestros cuerpos, de igual forma sentía sus fuertes brazos oprimiéndome contra su cuerpo.


-Se solo... para mí... por favor... -soltó en un susurro con un toque de ternura.


-... Hai... -susurre sin tener en cuenta la magnitud de lo que significaba esa sencilla palabra. No lo pensé, fue un impulso, solo me deje llevar...


Tal vez fue lo único que logre responder debido al gran cansancio que me atrapo en instantes...


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Recuerdo que ese día se veía especialmente alegre, diciendo algo como que estaba feliz porque volvería a ver a su mejor amiga desde hace tiempo, dijo que me llevaría para que me conociera, y conocer a sus dos hijos.


Ahí lo vi, ese niño de 6 años al igual que yo en ese entonces, se veía algo... indiferente, volteo a verme, como toda niña gentil e inocente le sonreí, el solo volteo con un gesto de desagrado en su rostro, -tonto- pensé, entonces voltee a ver al otro niño, más alto, tal vez unos 8 años, el me sonrió, fue amable en comparación a su detestable hermano. Fue ahí cuando conocí a los Uchiha, un niño amargado y odioso y el otro amable y gentil.


Me mantenía en uno de los columpios, balanceándome a mí misma, todo era tan tranquilo, el punto de reunión fue en el parque, ahí estaba divirtiéndome como siempre, de un momento sentí un fuerte empujón en mi espalda que me hizo caer al piso, es este caso, a la tierra.


Cuando me percate de lo que sucedía ahí estaba ese endemoniado niño, ¿por qué mierdas me empujo? no lo sé pero el maldito mocoso se burlaba a más no poder...

omg!! o////o
kyaa te kedo genial >/////<
conti conti pronto onegai ://3

*¬* coooooooooooooooooooooooooooooooooooooonti onegai
y si yo soy solo para el por que no puede ser el solo para mi
eh? eh? vaya injusticia ¬¬
me encanto gomene por no comentar en los ultimos caps, estuve fuera y no podia comentar
pero al igual que este estuvieron geniales!!!
conti onegai!

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conti onegaiiiiiiii!

AHH FUE TAN TAN!! TAN!!
KAWAI!....
mi quiere ser solo para el
siii conti! no me empujes uchiha idiota!

*Q* tu fic es re-geniall >w< lo amo y lo sigo desde hace uun tiempo primer comen owo me encanta y cabe decir k me encanta como escribes >w< ne ne conti sii sasuke hentaii >w< kawaaii

Que genial *3* el ecchi del día x//D haha ~ Espero conti owo

Oh Mai Goh!! Lo ame!! Te quedo genial!! Es tan agsfdgasg!! QDQ conti onegai!! esta genial!! en serio!!