Asfixia. 12. Lo que menos imaginas tal vez sea lo que más Deseas.

Bien gente pues aquí una conty más, de verdad que les agradezco demasiado sus comentarios, me alegra que les guste esto, de verdad muchas gracias a todas las que leen n_n





















-- Tal vez fue que al momento era alguien libre y estar contigo era para divertirme, trate de convencerme de que no era nada serio, tenía presente cada uno de tus defectos. Todos tus malos chistes, tu charlatanería, tu falta de conciencia, ¡cómo te aborrecía! y como una ironía, ahora me tienes enloquecida... -- Elisa Petrikowski--





Que extraña manera de decirlo todo por el hecho de dejarme llevar por un extraño sentimiento.


Ya no podía parar, ya no había vuelta atrás, las palabras salían tan fluidamente como si hubiera sido memorizado.


-Es de lo más extraño, lo sé, se supone que solo somos amigos pero cada una de las incontables veces que pasamos juntos me hacen pensar que no quiero alejarme de ti, es raro, lo sé, ya no lo entiendo porque yo no quería esto...


-Basta -pidió lo cual en ese momento ignore.


-Se supone que la persona que me gusta es Itachi pero estando tu el ya no me interesa lo cual es frustrante...


-(---) basta -volví a ignorarlo.


-¿Acaso tu lo entiendes? podrías explicármelo o tal vez para ti es diferente, tal vez no te ocurre lo mismo, pero que estoy diciendo si solo soy una más en tu lista, no lo sé, estoy tan confundida...


-¡Ya basta! -Grito. Me tomo de uno de mis brazos jalándome hasta adentro de la casa.


No caía en cuenta de lo que pasaba, ¿cuál sería su opinión ante lo dicho antes? jamás creí verme así, jamás imagine liberarme de esta manera, peor aún, todas y cada unas de las cosas que dije aún no están del todo claro en mi mente pero fue más mi adrenalina que no me limite siquiera a pensarlo un poco.


A jalones me llevo hasta su habitación, la casa parecía estar sola, aunque me preocupara por si alguien no s veía encerrarnos juntos a este punto era lo de menos.


Ambos entramos, lo único que hizo fue cerrar la puerta, ni siquiera se molesto en encender la luz pero la pequeña ventana que permitía filtrar un poco de luz, lo suficiente como para distinguir su silueta.


Tan desesperado tomo mi rostro para besarme, no lo dudo para tomar mis labios, en mi caso era igual, no lo dude para aceptar ese beso, ese beso que tanto deseaba, nuestras lenguas moviéndose al mismo ritmo, sincronizadas, como si ya conociéramos el movimiento del contrario. Mis manos se acomodaron sobre su cuello mientras que las de él se deslizaban por mi cintura, mis caderas, mis muslos para detenerse ahí, sujetarme con fuerza provocando que de un pequeño salto de mi parte me colgará en su cuerpo enrollando mis caderas en sus piernas y claro, sin dejar de besarlo. Sujeto mis nalgas con fuerza para poder movernos, me llevo hasta pie de la cama donde corto el beso para arrojarme en esta sin la mínima delicadeza.


-Auch! -bufe al sentir el choque entre mi cuerpo y el colchón -¿no puedes ser más delicado? -agregó al ver como dejaba desnudo su torso.


Entonces se acerco subiendose a la cama sobre mi pero cuidando de no lastimarme con su peso y sin perder tiempo comenzó a devorar mis labios, tan caliente, tan delirante.


El ambiente, la situación, todo comenzaba a ser perfecto, sí, esto era lo que deseaba, así es, el estar con él me enloquece, el estar con él me hace sentir cosas que jamás imagine, me hace perderme, sus caricias, sus besos, sus excitante voz, todo su cuerpo, todo de él, ¿qué se supone que es esto? ¿Cómo se le llama a esta sensación? ¿Cómo se le puede llamar a este sentimiento?


Una a una nuestras prendas caían, cada una de las ropas en ese instante sobraban, mis manos hacia lo suyo llenas de desesperación por poder tocar su piel. Sus ya expertas manos me desprendían de mi ropa la cual caía al rededor de la cama.


Nuestra piel se tocaba, nuestro calor aumentaba, sus deliciosos besos no paraban, sus delirantes caricias estremecía cada parte de mi piel. Era tan distinto a lo que he sentido antes, tan mágico, tan sensual, tan pasional, el ambiente era... especial.


Nuestros cuerpos al fin resultaban desnudos, el juego de solo tocarnos, besarnos sin control, marcando nuestra piel con mordidas, besos húmedos, marcas de sus manos, esas manos que tanto anhelaba que me tocarán.


-Sasuke... -susurre en un gemido al sentir como jugaba con mis senos, los estrujaba a su antojo, estimulaba mis pezones, los cuales apresaba en sus dientes.


Un fuerte rubor cubría mis ojos, mi respiración se sentía descontrolaba, mis ojos cristalinos, mi vista nublada y cada segundo que pasaba me incitaba a perder la razón.


Hasta donde recordaba esto no era la correcto, se supone que desde un inicio me negué a esta idea, pero, al darme cuenta el grado en que lo deseo me hace perder la cordura, olvidarme de que está bien o está mal, olvidarme de la persona cuya reputación no es la mejor, olvidarme y pensar en solo lo que es él, solo el hecho del que está aquí y ahora, solo el hecho de que me este besando, solo el hecho de que pronto me hará suya.


Enmarque su rostro con mis manos tomando sus adictivos labios, agregando un toque sensual al jalar con delicadeza de su labio inferior.


-¿Crees que las cosas se van a quedar así? -Agrego al dejar de besarme.


-¿A... que te refieres? -pregunte ingenua.


-Dijiste que serías solo para mí y terminaste con Itachi.


-Perdóname -susurre al desviar la mirada.


-Eso no basta.


Entonces, con la fuerza que desconocía de mi misma logre tenerlo bajo a mí, me senté sobre sus caderas sintiendo su ya despierto miembro rozar contra mi entrada, comencé un ligero movimiento de vaivén no solo para el disfrute de él, también aumentando mi propia excitación.


-Perdóname... -articule entre gemidos -ahhh... onegai, tan solo quiero que ahora pienses solo en mi... ahh -cada jodido momento en que fingía las penetraciones, en que nuestras intimidad se rozaba me hacía enloquecer -que me quites la sensación de esas caricias... y me marques con las tuyas...


Baje a su cuello, lamiendo su piel, marcando, porque si él insistía en que yo era suya yo también tenía derecho reclamarlo como mío. Baje en un recorrido de besos por su pecho su abdomen, quería grabarme cada parte de él, entonces, llegue hasta cierto punto de su cuerpo que ya pedía atención a gritos.


-Ahhh... -solto un quejido ronco echando su cabeza hacia atrás al sentir como tome entre mis manos su pene, frotándolo de arriba hacia abajo con facilidad gracias a su pre-semen que chorreaba por toda la extensión. En seguida bese la punta succionando un poco y estimulándolo con mi lengua.


-Ahh... (---)... onegai... -pidio de la forma más erótica que solo logro prenderme aún más.
No quise hacerlo esperar más y me metí completa su erección, la saboree totalmente, se sentía tan caliente, tan húmeda, tan candente.


Comencé el movimiento de entra y saca en un perfecto ritmo que me permitía saborearlo y degustar de sus líquidos que cada vez aumentaba.


-Continúa... -pidió al llevar sus manos a mi nuca.


Ese delirante sexo oral me hacía enloquecer, jamás creí sentirlo de esta manera, me enloquecía escuchar sus sensuales quejidos, me hacía saber el placer que le estaba provocando. Con una de mis manos masturbaba la parte de su pene que no entraba en mi boca y con mi mano libre masajeaba parte de sus hinchados testículos, sabía que eso lo enloquecía.


-(---)... basta... ya no aguanto... déjame hacerlo... -pidió con dificulta al rato de seguir con la felación.


Saque su miembro de mi boca no sin antes depositar un último beso en la punta.


Así como él lo deseaba también así lo deseaba yo, tan desesperada, tan ansiaos acomode mi cuerpo aún sobre él, con la punta de su miembro en mi húmeda entrada y así, con lujuria total comencé a devorarme su erección.


-Eres... tan estrecha... tan cálida... -agrego al ver cómo me auto penetraba.


-También eres... cálido... -afirme.


Tan dura, tan grande, tan caliente, sentía el arder en mis entrañas, el hervir de mi sangre, mis sentidos al máximo y una extraña sensación, una sensación de satisfacción combinada con placer, con locura, no, no sé cómo llamarle a esto.


Inicie moviendo mis caderas en círculos disfrutando de su candente herramienta en mi interior, sintiendo un sin fin de espasmo deliciosos en mi vientre y un deseo enloquecedor de fundirme con él.


Tan fascinante, mi cuerpo ardía al sentir su calor, estar con él, esta persona que me provoca, que me atrae, que me enloquece.


Sujeto mis caderas para incorporarse y acomodarme en su regazo para así continuar con el sexo, moviendo sus caderas hacía arriba penetrándome una y otra vez, sintiendo el delirio de su pene rozar contra mi interior.


-Ahhh... Sasuke... Sasuke... esta vez lo prometo... solo seré tuya -articule entre gemidos para después devorar sus labios.


Nuestros cuerpo fundiéndose en el mismo calor, mi koi sujetando mis caderas con fuerza y embistiéndome sin control, sujetándome a sus hombros, en ocasiones alborotando su cabello, ambos rosando nuestros sudorosos cuerpo a causa de esfuerzo. Todo está al límite, las sensaciones, los sentidos, todo, me sentía derretir junto con él, como si cierta conesción nos mantuviera unidos, no solo el hecho físico, algo más profundo, algo que me es difícil explicar.


-(---)... (---) -mi corazón latia al grado de sentirlo salir de mi pecho, lo mejor, también podía escuchar los latido de mi amante, mis gemidos no paraban -yo... yo...


Sus manos aprisionaron con fuerza mi cuerpo, algo inimaginable creí escuchar de su boca antes de llegar juntos al éxtasis. Nuestros cuerpos se retorcieron de manera estremecedora al sentir el tan fascinante orgasmo.


Caí en sus brazos como ya me era costumbre, compartiendo ambos el mismo calor.

Casi!!! casi casi casi que lo dice!! Ahh!!! que desesperacion D:
ya extrañaba este fic XD espero la contii :3

waaa extaraba el fic!! que ansias tenia por leerlo
lo dijo o no lo dijo?!
tiene que decirlo? el lo sabe yo lo se? por que maldita sea no lo dice¿!?!
jejej gran fic
espero poder leer la conti pronto cuidate
:D

Que le costaba decirlo de una j*dida vez D:?
Todo se pone tan bueno TuT que hermoso !
:,3

sugoi!!
es tan kawai OwO

contiii pleaseee