● ~Chimamire no yume [+18]~● ~Capitulo 2~

En el capitulo anterior:

Spoiler:

Nota: este es un fic gore, es decir 18, los
spoliers contienen imágenes gore, con sangre, en algunos no hay mucha,
pero en otras si. Escribi esto para evitar posibles traumas con
esto,ahora, si dais el spolier, es bajo vuestra responsabilidad, ya que
yo ya adverti sobre el contenido.

Chimamire no yume {+18}
~Capitulo 2~



Aprendiendo
a sobrevivir.

Spoiler:

-¡¿QUÉ?!



-¿Acaso no lo has oído? Yo mismo, te voy a
enseñar a sobrevivir en este mundo.



-No… no puedo cogerlo….¡Yo no mato a nadie!



-Debes hacerlo… en este mundo no hay sitio
para la compasión, solo existe la
venganza y el dolor. Dime (…),¿acaso no deseas vengarte de aquellos que mataron
a tu querida madre?



-¿Y tu como sabes lo de mi madre?



-Tengo mis contactos, pero dejemos ya tanta
charla, dime, ¿quieres ser mi aprendiz y aprender a matar, o quieres salir
fuera, indefensa, sin nada, para que te maten los demás? Piensa en tu madre, en
lo que dijo, huye, e intenta sobrevivir. ¿No quieres sobrevivir ni si quiera
por ella?



-Yo…. Yo…. Lo hare… ¡aceptame como tu aprendiz hiroshi! Dejame
ser tu aprendiz… ¡y vengar la muerte de mi madre!



Sin dudarlo mas, cogi la pistola, y me prepare
para mi entrenamiento. Quien me iba a decir, que algun dia manejaría un arma, y
mucho menos, que mataria a alguien…



Lista para mi entrenamiento, segui a hiroshi
hasta el exterior de la casa a través de la puerta trasera, que conducía hacia
un gran patio, con una pequeña casa, de la que provenían gritos de personas.
Fui a acercarme, a socorrer a aquellas personas que necesitaban mi ayuda, pero
hiroshi me agarro del hombro antes de abrir la puerta.



-Tranquila, ya me encargo yo de ellos.



Como dijo, el se encargo, cogió una llave de
su bolsillo derecho, y abrió la puerta. Era increíble, un monton de personas
salian de ahí, no me esperaba que pudieran caber tantas en una casa diminuta,
yo me preguntaba en ese momento: “¿Por qué estaban ahí?”, mas no tuve demasiado
tiempo para pensar, ya que aquellas personas vinieron directamente hacia mi.



Me empezaron a agarrar primero de los brazos,
luego me mordieron, haciendo que soltase la pistola del dolor, después me
empezaron a agarrar de las piernas, y me tiraban de ellas para intentar arrancármelas.
Presa del pánico, solo pude gritar y pedir auxilio.



-¡Maestro hiroshi!¡Salveme!



Sin embargo, de nada sirvieron mis gritos. Sin
mostrar expresión alguna, hiroshi me respondió:



-Tu primer entrenamiento comienza ahora. Mátalos.



Me quede de piedra nada mas lo dijo, todo fue
tan de repente, que no tuve tiempo ni para reaccionar, sin embargo, ¿Cómo los
iba a matar? Estaba atada de brazos y piernas, y la pistola estaba en el suelo,
fuera de mi alcance.Al final,empeze a llorar, crei que el fin de mi vida aquí
había llegado, y que nunca sabria la verdad que se ocultada tras todo esto.
Entonces, hiroshi añadió unas palabras antes de irse a la casa:



-Recuerda lo que te dije, en este mundo no
existe la compasión, solo hay venganza y dolor. De esas cosas, una te llevara
hacia la victoria, la venganza. Esa es la fuente de todo poder, mas para
conseguir ese poder, necesitas experimentar el dolor, de perder a un ser
querido, o ser herida por otras personas. (…), se que puedes con ellos, pero
deja de pensar, solo actua.



Sumergida
en mis pensamientos, recordaba aquellas palabras que resonaban cada vez mas
fuertes en mi cabeza, sin embargo, de
nada servia pensar, como el mismo dijo, hize yo. Primero, para conseguir moverme libremente,
ya que no podía mover ninguna de mis extremidades, balancee mi cuerpo de un
lado para otro, hasta que mi cabeza, consiguió alcanzar a una de las manos de
aquellas personas, justo en ese mismo instante, le mordí la mano, haciendo que
la apartara,y uno de mis brazos quedara libre. Con la movilidad absoluta de uno
de mis brazos, impulse mi cuerpo hacia abajo, entonces, extendi mi brazo lo mas
posible hasta coger la pistola. Con la pistola en mi posesión, dispare hacia la
mano de otro de ellos, que sostenía mi pierna, pero no salió como espere, el
primer disparo aparte de que falle, me hirió mas la pierna, sin llegar a tocar
la mano, y me disloco el hombro por la potencia de este. Con un balazo de una
pierna, y con el hombro dislocado, no se como, pero saque las fuerzas para
conseguir realizar un segundo disparo, esta vez acerte, y le di no en la mano,
si no en la cabeza, reventándosela. Dos de mis extremidades ya estaban libres,
mas no cante victoria, ya que aun me quedaban otras 2 apresadas por las manos
de aquellos. No sabia que hacer, pero no me hacia falta saberlo, simplemente,
actue. Levante la pierna hacia arriba, y le di a uno en la cara. Con los dos
pies en el suelo, estaba mas tranquila, solo un tiron con el brazo hacia mi me
basto para despegarlo de la mano de otro. Consegui liberarme de ellos,¿Cómo fue
posible para alguien como yo? No me lo podía creer, yo, totalmente sola lo
hize, pero no me sentía orgullosa de haberlo hecho, porque no había nadie que
viera como lo hacia, ni siquiera el maestro hiroshi estaba ahí, podría haber
estado mirando como lo lograba a través de alguna ventana de la casa, mas no
hizo ni eso. Bueno, igualmente, no era hora de pensar en aquellas cosas en una
situación como esta, ellos todavía seguían vivos, y estaban dispuestos a
quitarme la vida si yo no les mataba antes.



La verdad
es que lo mas difícil de todo fue el principio, por lo demás, no fue para
tanto, y eso que me espere que seria peor de lo que fue en realidad. Con una
pistola, fui capaz de matarlos en menos de 10 minutos, aunque se me acabaron
las balas, y tuve que pelear cuerpo a cuerpo con algunos. Como eran varios, desgraciadamente, algunos
me agarraron por detrás mientras luchaba con otro. Pero por suerte, recuerdo lo
que me dijo mi madre que hiciera si me hacían eso en el instituto, aunque en este
caso fue en otro lugar, aquellas palabras me salvaron, se repetían
frecuentemente en mi cabeza: “hija mia, si alguien te agarra por detrás,
recuerda, haz lo que te dije, dales una patada en la entrepierna, nunca lo
olvides, en un futuro, puede que esto te salve la vida”. Mi madre tenia toda la
razón del mundo al decir eso, aunque ella esperaba que me salvaría de unos
acosadores, no de unos extraños que querian arrancarme los miembros y devorarme.



Gracias a
aquel consejo, acabe con 2 mas. Solo quedaba uno, estaba desarmada, y
malherida, pero no me tuvo que quedar mas remedio que luchar contra el cuerpo a
cuerpo. El comenzó primero, levantando la pierna hacia arriba haciendo que me
golpeara en la cara, con mis reflejos, yo aproveche ese mismo instante para
cogerle esa pierna. Asi que, tire de ella hacia mi, para que se cayera
abriéndose de piernas. Del dolor, se quedo ahí parado, sin reaccionar,
entonces, use mi golpe de gracia contra el, cogi la pistola, y como no tenia
balas, pues se la lanze en la cabeza, clavándosela, y matándole. Aunque por si
acaso, le di unas patadas y puñetazos en la cabeza, hasta desfigurarle tanto la
cara, que hasta quedo irreconocible, ya ni parecía una persona humana de lo
deformada que se la deje.



Por fin,
acabe con esta dura batalla, estaba satisfecha por haberlo conseguido y por no
haber muerto en mi primera prueba, pero algo faltaba. Justo lo que pensé, me di
la vuelta, mire en la puerta por la que vine a este patio, y ahí no estaba. Mi
maestro, no vio nada, no observo como lograba matarlos a todos, no se intereso
ni un poco en mirarme desde la ventana, o eso crei. Me volvi a dar la vuelta y
le vi. Al principio reaccione sorprendida, porque…¿Cómo pudo haber entrado por
la puerta del exterior si no le vi en todo este tiempo?



Mas a mi
ya me daba igual, ¡mi maestro estaba ahí para darme la enhorabuena por todo!
Con una gran sonrisa, fui corriendo hacia el. Sin embargo el, me miraba
fríamente mientras se sacaba algo del bolsillo izquierdo, una pistola,¿para que
la querria usar? Mas tarde, ya averigue por mi misma el por que. La pistola, la
uso contra mi, me miro fijamente, y me dijo:



-nunca
confies en nadie, ni siquiera en tu mejor amigo.



Tras decir
eso, me disparo sin dudarlo.



Yo,mientras
tanto, solo sabia ponerme a llorar, ¿el resultado de todo este esfuerzo fue en
vano? ¿Iba a morir ahora asesinada por mi propio maestro?



Igualmente,
yo seguía confiando en el, la herida profunda que me hizo en el estomago, me
ardia de dolor, mas igualmente , me arrastraba hacia el,luego me levante,
esperando, a que en cuanto estuviera en frente suya, me cogiera entre sus
brazos al caerme. Mas me dejo caer, lo único que hizo, fue echarse un poco para
atrás, para que mi sangre no le salpicara en su ropa, mientras yo, me cai al
suelo y sufria aun mas, no solo física, sino también emocionalmente.



Otra vez,
mis ojos empezaban a cerrarse lentamente, volvia a desmayarme como la ultima
vez. Despues de cerrar los ojos, no sabia que paso, solo recuerdo a partir de
despertar y recuperar la consciencia. Estaba, en una cama grande y blanda, era
realmente confortable. Me situaba, en una habitación de paredes azul celeste.
No tenia ventanas, y había un monton de estanterías, llenas de videojuegos y
consolas. Al ver todo esto simplemente pensé: “¡esto es el paraíso!” Sin
embargo, me confie demasiado al pensar eso. Nada mas pisar el suelo de madera,
las tablas se rompieron, y se me quedo atascado el pie en el agujero que
provoque al pisarlo, soportando el dolor de cómo se me iban clavando,cada vez
mas profundamente, las astillas de la madera.



Con el pie
enganchado, no podía moverme, y no me quedo mas remedio que quedarme ahí,
quieta, mientras veía, como alguien entraba por la puerta. Yo temblaba del
miedo que me causaba imaginarme lo que hiroshi me haría esta vez, mas no todo
fue esta vez tan horrible como espere, al parecer, esto que me paso, formaba
parte de mi segundo entrenamiento, el menos doloroso, ya que solo me heri el
pie.



-Segundo
entrenamiento, nunca juzgues a un libro por su portada. Si lo haces, solo te
llevaras sorpresas, y no precisamente buenas.



Despues de
decir eso, se acerco a las estanterías, empezó a abrir las cajas de los
videojuegos uno a uno, estaban vacias, no tenían nada. Luego, dio un pequeño
puñetazo a la estantería, y se derrumbo, cayendo encima de las consolas que
estaban al otro lado. Ese derrumbe, hizo que las consolas se abrieran por
dentro y se supiera que en realidad, las consolas estaban quemadas por dentro,
es decir, eran totalmente inservibles.



Al ver
todo eso, me quede totalmente de piedra, no me esperaba que fuera en el fondo
tan horrible, pero eso no era todo. Hiroshi, se acerco a la pared, y puso una
mano en ella, con los dedos, apretó hasta que hizo un agujero en la pared.
Metio los dedos lo máximo que pudo, y tiro del yeso de la pared, haciendo que solo
se viera la parte hecha de madera. Estaba llena de bichos, cucarachas, arañas,
y hasta algunos, que no he visto nunca en mi vida.



Este
segundo entrenamiento, me hizo abrir los ojos, y entender como era la realidad.
La realidad, la vida, todo es un engaño, no existe lo bueno, eso simplemente
son cosas que imaginamos, y que a veces ocurren, mas de ello solo quedan
recuerdos vagos que se acaban olvidando. La realidad de todo, es la maldad, la
desconfianza, la traición, la frialdad, y la única manera para sobrevivir a
aquello, era tener una habilidad con la que algunos nacen, y otros entrenan
para tenerla, la habilidad de matar.



~Fin del capitulo 2~



¡Espero que les haya gustado!¡No se olviden
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