La Vida se mueve como una banda Transportadora. (Capitulo 3)(+15)

por **Shiroyasha** Mar Ene 10, 2012 5:31 pm

Aquí la conti, espero que les guste n______________n

-Hola -Dijiste con voz seca.
-Tiempo sin verte -Se sienta a tu lado. -¿Por qué tan sola?
-Nada más.
-Parece que estás molesta, ¿te pasó algo?
-Me acaban de arruinar la noche.
-Perdón si te moleste.
-¡Ah! No lo digo por ti -Aclaras -Es solo que, el idiota de mi novio se acaba de ir con otra.
-¿Cómo? -Murmuró -¿Acaso todavía sales con Sasori?
-Eso creí -Dijiste bebiendo el último sorbo de tu bebida.
-Ese imbécil -Retomó -No se da cuenta de la hermosa chica que tiene.
-Gracias -Te encojes entre hombros apenada.
-¿Oye quieres bailar conmigo?
-Perdóname pero ahora con esto no tengo muchas ganas, pero gracias Hidan.
-No te preocupes.
Ese chico de cabello grisáceo, apuesto, también conocido como un mujeriego, más que un amigo lo considerabas un conocido.
-Sabes -Comentó -Esto del amor se me hace muy complicado, a mi me han decepcionado varías veces, lo he dado todo por una chica para que al final no me valore.
Volteas a verlo con curiosidad.
-¿En serio?, si tan solo Sasori pensará como tu -Suspiraste.
-Nunca he tenido la oportunidad de hablar con alguien así -titubeó -¿Quieres ir a un lugar más tranquilo para poder platicar mejor?
¿Ir a un lugar más tranquilo? Ya sabías lo que eso significaba y no precisamente lo que parecía, menos viniendo de un hombre como Hidan, quien era conocido por ser un galán con las chicas, obviamente su proposición para ti era ir a tener sexo;
-Bueno yo... -Pensaste; pero si Sasori se fue con una chica ¿por qué no jugar su mismo juego? -Está bien.
Ambos se pusieron de pie, se despidieron de su compañía y salieron del bar. Cuando subieron al auto te preguntabas a ti misma si era correcto lo que estabas a punto de hacer, tanto negarte a Sasori para que en un momento de enojo e impulso terminarás con otro. Hidan dio marcha al motor conduciendo despacio;
-¿A dónde vamos? -Preguntó con su mirada puesta al frente.
-No lo sé, a donde tú quieras -Titubeaste.
Sin decir algo más condujo el vehículo, aunque en tu mente tenías la idea de hacía donde se dirigían, pero sabías que tenías que detener todo eso, pero ¿cómo? no imaginabas cual sería la reacción de Hidan. A decir verdad él notaba tu nerviosismo, chocabas las yemas de tus dedos sobre tu rodilla en un ritmo rápido, además de que mantenías la mirada fija hacía la ventana de al lado. Necesitabas librarte de la situación pronto, no importaba lo que sucediera.
-Oye... Hidan -Murmuraste apretando los puños sobre tu rodilla y manteniendo la cabeza agachada -Yo... no debí aceptar tu invitación...
-¿Por qué lo dices?
-Ya sé a dónde va todo esto, no solo me invitaste para platicar ¿o sí? Ya sé lo que buscan los chicos como tú, y yo... no quiero acostarme contigo.
Te encogiste entre hombros apenada, ahora esperabas un insultó, un reclamó era obvio para ti que él se molestaría.
-Perdón por hacerte perder el tiempo -Agregaste.
El solo esbozó una sonrisa, en ese instante se encontraban rodeados por un silencio, ¿qué es lo que pasaba por su mente después de tu declaración?
-Está bien si no me llevas a casa, puedo regresar sola.
-Como crees que te voy a dejar sola.
-Pero...
No quisiste insistir más ni molestarlo con tus excusas, te mantuviste callada durante todo el camino aunque empezaste a notar que el rumbo que tomaban no era precisamente a tu casa, de hecho tomaron camino hacía las afueras de la ciudad, eso te hizo sentir más nerviosa, podría decirse que un poco de miedo también. ¿A donde te iba a llevar Hidan?, peor aún, ¿qué es lo que harían, o lo que te haría? Después de unos minutos de recorrido estacionó el vehículo, por la ventana lateral pudiste observar unos cuantos autos en el lugar, no sabías si sentirte un poco más tranquila por el hecho de que no estarían solos pero era seguro que estabas confundida. Hidan salió del coche, le dio la vuelta y abrió tu portezuela;
-¿Dónde estamos? -Preguntaste mirándolo de forma confundida.
-¿Nunca habías venido a esté lugar? Es perfecto para poder platicar, digo, el más tranquilo que conozco.
-Pero creí que...
-Nunca pasó por mi mente llevarte a un lugar para tener relaciones contigo, ya te lo dije, solo quiero platicar -Sonríe.
Apenada extendiste tu mano para que te ayudara a bajar, cerró el coche para continuar caminando. El lugar era conocido como el Mirador, un lugar alto a las afueras de la ciudad, dando una perfecta vista de esta. Llegaron hasta un tipo de barandal donde Hidan recargo su espalda dejando frente a él;
-Este lugar... no, nunca había venido -Dijiste admirada por las luces de la ciudad.
-¿Por qué pensaste que me acostaría contigo? Digo, eres hermosa pero no soy tan descortés con las chicas.
-Bueno no sé, eres conocido por seducir mujeres ¿no? -respondiste -No sé lo que estaba pensando, perdón.
-Tengo fama ¿eh? -comentó admirado -A decir verdad no suelo acostarme con tantas chicas.
-¿En serio?
-De verdad, aunque hay chicas que se te ofrecen como todas unas zorras, pienso que es más emocionante el seducirlas, hablarles cosas bonitas, hacerlas sentir bien -Argumentó.
-Que no sería mejor así, digo, si ya se te ofrecen te evitas todas esas cosas ¿no? -Declaraste.
-Si, tal vez -admitió -pero no es mi caso, tampoco lo hago con cualquier chica, solo la que valga la pena.
-¿Y por qué no tienes novia? -Preguntaste.
-Porque no he encontrado a alguien que valga la pena.
-Pero si tuvieras novia -retomaste -Podrías tener a la mano, por así decirlo, lo que a la mayoría de los hombres siempre les gusta.
-¿Sexo?
-Sí
-Ni creas, también hay chicas recatadas que quieren llegar virgen al matrimonio.
-Como yo -declaraste -¿Por qué crees que Sasori ya se aburrió de mí?
-¿Eres virgen?
-Sí -Respondiste con un notorio sonrojo en tus mejillas.